Que el amor duele, que es irracional, impredecible y particularmente, eterno. Que hay que esperarlo, que hay que sufrir por él. Que se presenta atravesándonos la piel como un flechazo y luego de eso hay que superar todo obstáculo para conservarlo aunque nos lastime. Que el amor lo puede todo.
Que nos hacía únicas, mejores, privilegiadas. Que sin él estamos incompletas. Que sin pareja estamos solas, sin importar cuánta gente nos rodee. Y que estar sola es un pecado, significa ser fracasada, resentida, fea, demasiado ambiciosa, desleal, egoísta.
“¿Cómo amar sin poseer?”, se preguntaba Oliverio Girondo “¿Cómo dejar que te quieran sin que te falte el aire? Amar es un pretexto para adueñarse del otro, para volverlo tu esclavo, para transformar su vida en tu vida”.
Frente a esta duda que también es nuestra, surgen las imágenes. La búsqueda de una mirada propia, donde la amistad, el sueño, las mascotas, la comida, el placer, la música son algunos de los conceptos que surgen en estas expediciones en pro de un lenguaje menos aparatoso, idealizado y moralizante.
Buscamos darle a la palabra amor otro significado: el amor como un trabajo de tiempo completo, con obligaciones y responsabilidades, con disfrute y cansancio, con garantías, con éxtasis y desgaste, ni eterno, ni monogámico ni celoso.
El amor como un tejido comunitario, como un deporte que se practica y que, a diferencia del dinero, se multiplique cuánto más uno lo dé. El amor como un sentimiento no jerarquizable ni exclusivo de la relación de pareja y menos, mucho menos, de la heterosexualidad. Buscamos el amor en los vínculos filiales, amistosos, compañeros, en el mate, en el té con leche, en un dibujo, en el trabajo, en el estribillo de una canción. Y que esos espacios, momentos y dimensiones afectivas no valgan menos que una pareja oficializada bajo un altar y atada a la idea anacrónica del “felices para siempre”.
Lucía Rivera López – «Acariciar algo que duerme»
Rocío Escobar – «Gozar. Con unx, con otrxs»
Melina Zanacchi – «Amor animal»
Julia Distefano – «El amparo»
Catalina Distefano – “Complicidad”
