En un fallo histórico, la jueza Myriam Cataldi, del Juzgado Nacional en lo Civil 7, aprobó el pedido de Lara Bertolini de que el Registro Nacional de las Personas reconozca en el DNI la identidad de género autopercibido. El fallo se logró gracias al material probatorio que Lara Bertolini entregó a la Justicia en una presentación civil sumaria, haciendo valer parte de la ley de identidad de género que no se cumplía a pesar de estar sancionada desde el 2012.
El viernes pasado Lara, estudiante de abogacía y empleada del Ministerio Público Fiscal, consiguió que de ahora en adelante su documento de identidad diga “femineidad travesti” .
Este fallo es único a nivel mundial, ya que Argentina es el único país cuya Ley de Identidad de Género (26.743) incluye el género autopercibido y sienta un precedente fundamental para que el Estado deje de marcar la identidad de género de les ciudadanes.
Además, la jueza dictaminó que de ahora en adelante el Registro Nacional de las Personas (Renaper) deberá abrir la cantidad de campos para que opciones de género autopercibido existan. «Muchos de los conceptos relativos al género que se utilizan en las culturas occidentales se basan en una concepción binaria del sexo, que considera que existen dos polos opuestos: varón y mujer, masculino y femenino, hembra y macho. No hay dos géneros que se corresponden con dos sexos, hay tantos géneros como identidades, y por ende tantas identidades de género como personas», explica el fallo.
Un día después, Bertolini realizó una conferencia de prensa en el centro cultural “El Hormiguero”. Estuvo acompañada por las activistas travestis Violeta Alegre y Marlene Wayar, entre otres.
En diálogo telefónico con El Grito del Sur, Bertolini reflexionó acerca de lo sucedido:
¿Tuviste muchas trabas judiciales en el camino?
Mirá, fue más difícil soportar durante casi dos años que mi identidad esté sujeta al par sistémico sexo femenino masculino.Yo hice esta presentación luego del juicio de Diana Sacayán, donde se dictó como sentenció ‘crimen agravado por la identidad de género’, o sea travesticidio. ¿Si se reconoce la identidad de género travesti al ejecutar el homicidio porque no se podría reconocer en vida mi identidad?
¿Qué significa para vos este fallo histórico?
Primero, poder pararme como femineidad travesti reconocida por el Estado; por lo tanto, es una identidad soberana porque está dentro de los cánones del Estado argentino, reconocido por el Registro Nacional de las Personas y el Poder Judicial y, segundo, que no es una identidad obligada por el control que hace el Estado, desde lo masculino y femenino, sino que se respeta mi identidad.
¿Y para la comunidad LGTBI?
Yo quiero que las personas del colectivo LGTBI entiendan que no es un fallo para una persona particular, sino que influye en cómo se nombra la sociedad y da la posibilidad que ya estaba pensada desde la presentación del fallo de respetar todos los géneros identitarios.
¿Se puede pensar esto para infancias trans?
Siempre son nuestra prioridad las infancias, muchas infancias trans no podían registrarse ni aún con el permiso de los padres porque porque el área administrativa no reconocía esto. Con este fallo de un Juzgado Civil Nacional se aplica en todo el territorio.
¿Qué impacto crees que va a tener el fallo en este momento donde hay una corriente de feminismo transfóbico?
Resignificar la libertad de la autodeterminación individual de la identidad de las personas, dejar de correr a las identidades autopercibidas con la ideología de género. También nuevamente desde Argentina y América Latina transformar el entendimiento de la ley de identidad de género pudiendo abrir un segundo paso para que se reconozca la identidad autopercibida.
¿Creés que otros países van a imitar esta legislación?
Por ahora es única en el mundo, pero obviamente dentro de la academia va a hacer mella. Como decía Marlene Wayar en la conferencia de prensa: ¿qué va a pasar cuando llegue una feminidad travesti a las migraciones de EE.UU. y en el documento no diga ni varón ni mujer?
