Una mujer haitiana fue quemada por el dueño de la casa que alquilaba en Bernal, partido de Quilmes, y como consecuencia del ataque, la joven perdió su embarazo. La situación comenzó este domingo a la madrugada, cuando la pareja reclamó que se le devolvieran los meses correspondientes al depósito luego de que el propietario intentara desalojarlos antes del vencimiento del contrato. Cherline Chery, de 29 años, que estaba embarazada y se encontraba durmiendo adentro de la propiedad, sufrió graves quemaduras que la dejaron en estado de coma y le generaron la pérdida de su embarazo.
La policía se hizo presente en el lugar, pero sostuvo que el problema se trataba de un «asunto de electricidad» despreciando el violento ataque. Testigos oculares refieren que pudieron ver al hijo del dueño lanzando una bomba de fabricación casera contra la casa. La mujer quedó internada en el hospital de Quilmes.
Jackson Jean, referente de la comunidad haitiana, acompañó a la familia al hospital y explica: «Ella se encuentra en coma y se agrava su situación respiratoria. El caso es muy grave, ya que la mujer perdió el bebé», agrega. «Ella estaba durmiendo, se quemó y el humo alteró su estado respiratorio». Producto del ataque, Stanley Plunier, marido de la joven, sufrió severas quemaduras en su brazo. «La policía ni siquiera le preguntó al marido qué había pasado, sólo interrogó al dueño de la casa. Dijeron que el fuego era producto de una falla de electricidad. No llevaron a nadie detenido, ni siquiera los interrogaron».
Stanley Plunier es el marido de la víctima. En diálogo con El Grito del Sur, por teléfono y a a punto de quebrarse, intenta contar la grave situación vivida: «La cosa pasó el domingo a las dos de la mañana.. Me levantó mi perro, abrí la puerta de mi habitación y el hijo de la dueña rompió la puerta, tiró una botella y prendió fuego la casa», cuenta Stanley. «La gran pregunta para mí es por qué la policía no entró a hacer una investigación, no me preguntó qué pasó ni cómo me llamo. Hay discriminación y por eso estoy sufriendo ahora. Ahora mi mujer está hospitalizada», explica el joven migrante, quien a partir de esa noche está practicamente en situación de calle, obligado a dormir en la casa de un amigo de la comunidad que lo alojó solidariamente.
La familia enseña el recibo a nombre de Cherline como prueba de pago del alquiler del mes de septiembre. Jackson Jean agrega que, al momento de realizar la denuncia en la Fiscalía, las autoridades judiciales establecieron que no había lesiones, a pesar de las graves quemaduras en el cuerpo de ambos. «Fue discriminación y negligencia. Incluso pusieron que Stanley era argentino», explica el dirigente haitiano. «Como referente de la comunidad creo que no podemos dejar que esto siga sucediendo. Estamos muy impactados y enojados», sentencia Jean.
