Los cuatro casos confirmados de coronavirus en el Complejo Penitenciario de Devoto dispararon todas las alarmas: son las primeros positivos que se registran en el sistema carcelario argentino y la situación preocupa por las pésimas condiciones de los detenidos. Hacinamiento, falta de higiene, nulas medidas de prevención y la desidia de las autoridades generan un combo potencialmente explosivo.
Desde hace un tiempo son numerosas las denuncias sobre las condiciones sanitarias en Devoto. Primero fueron las organizaciones sociales que trabajan en contexto de encierro. Más tarde el propio personal del Servicio Penitenciario: “Quiero denunciar que estoy de guardia en el SPF, Unidad de Devoto. No hay ninguna medida de seguridad, todo está contaminado, aún no vaciaron a los internos para la gripe. Por favor activen y obliguen fumigaciones tres veces por día en todo Devoto, aun con los mismos internos que trabajan«, decía la denuncia presentada al Ministerio Público Fiscal el pasado 28 de marzo por uno de los trabajadores.
Ahora, la situación se vuelve cada vez más compleja. Los casos confirmados en Devoto corresponden a cuatro trabajadores de la salud que se desempeñan en el lugar, mientras que otros once casos continúan en análisis: todos ellos son médicos o enfermeros. La angustia crece porque muchos de los enfermos que estaban internados en el Hospital Carcelario y que habrían tenido contacto con los contagiados, fueron devueltos a pabellones comunes.
Desde el Servicio Penitenciario Federal confirmaron la existencia de casos, aunque señalaron que se habrían infectado por fuera del ámbito carcelario. Sin embargo, en diálogo con El Portal de Villa Devoto, los trabajadores afirmaron: “Empezamos a sentir síntomas en nuestras casas. Uno de los infectados volvió de vacaciones de Brasil. Los demás casos muy posiblemente se hayan contagiado en la cárcel”.
Mientras tanto, la Cámara Federal de La Plata rechazó una decisión de la Cámara de Casación Penal bonaerense que hacía lugar a un habeas corpus colectivo en favor de un grupo de detenidos en penitenciarías de la provincia de Buenos Aires, considerados en situación de riesgo por el coronavirus. La disposición afectaba a 400 privados de su libertad por delitos menores y les concedía el beneficio de la prisión domiciliaria.
Al mismo tiempo, el combate al coronavirus en contextos de encierro genera diferentes opiniones a nivel internacional: esta semana se conoció que Chile indultará a 1300 presos. Mientras tanto, el rey de Marruecos anunció que hará lo mismo con 5.600 detenidos y el gobierno de Etiopía hizo lo propio con más de 4 mil presos. Por su parte, la presidenta del Tribunal Constitucional de Perú ha pedido al gobierno de ese país indultar a los presos.
