“Esto es como el Holocausto, donde muchos humanos fueron al horno”, se lamentó Sergio Sánchez, presidente de la Federación Argentina de Cartoneros y Recicladores, mientras la legislatura porteña votaba la modificación de la Ley de Basura cero y habilitaba el regreso de la incineración de basura al aire libre. Con carteles y banderas que señalaban los riesgos para la salud y el medio ambiente que implica la emisión de dioxinas y furanos, y otros que denunciaban la pérdida de trabajo en el sector de recicladores urbanos, miles de personas se manifestaron frente a la legislatura porteña contra lo que terminó siendo inevitable: el oficialismo logró imponer la reforma holgadamente, con el voto de 36 legisladores y la única oposición de Unidad Ciudadana y la izquierda.
Cerca de las 11:00 de ayer, unos 3 mil cartoneros y recicladores, junto a familiares y organizaciones sociales se reunieron en la intersección de la Av. Belgrano y 9 de Julio, donde marcharon con carteles y bajo las consignas: ¡No a la incineración! ¡Sí al Reciclado! contra la “iniciativa” del Gobierno de la Ciudad de quemar los desechos, gracias a la Ley Basura Cero. Una normativa y acto que los trabajadores consideran un atentado contra el medio ambiente, la economía popular y el trabajo digno.
Al medio día en la Legislatura porteña, se instalaron acompañados de murga y discursos de los principales referentes que hicieron los respectivos pedidos y advertencias, sobre los problemas que conllevaría la instalación de plantas incineradoras en la ciudad. “Hoy estamos contra la incineración, para que nosotros sigamos trabajando, con la dignidad que siempre lo hicimos. Este trabajo no lo hace cualquiera. Nosotros no somos descartables”, indicó el líder de los cartoneros y centró también su lucha en pedidos como: “Que cada compañero tenga su monotributo, su obra social y nuestro justo reconocimiento como cuidadores del medio ambiente”.
“Este laburo nos dignifica y nos hace trabajadores de la economía popular y solidaria. Y también soy abuela y madre de familia. No somos ‘ñoquis’ ni ‘choripaneras’, como este gobierno nos llama, por eso seguiremos acá luchando contra esta ley. Nadie nos detendrá. Sigamos adelante compañeros ¡Carajo!”, manifestó Claudia Silva, representante del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE). Silva, junto a Sánchez y demás presidentes de las asociaciones, cooperativas y organizaciones se reunieron en la intersección de la Av. Pte. Roca y Bolívar, donde se tomaron una foto grupal. Además, colocaron maquetas con bengalas de humo, para visibilizar la contaminación que producen las plantas incineradoras.
Para Maximiliano Andreaghis, delegado de la Junta Interna del Ministerio de Ambiente y Espacio Público CABA (ATE) la incineración de la basura no sólo significa problemas de salud sino también un “retroceso social que afecta a un alrededor de 20 mil personas que viven de la recolección, pues el negocio del reciclado, sólo favorece a pocas familias. Además está comprobado a nivel mundial que quemar basura contamina, por eso debemos evitar que se constrúyala primera planta incineradora”.
Cerca de las 13:00, los legisladores de CABA, adentro del Palacio de la Legislatura votaban en contra de la Ley Basura Cero. Los resultados fueron: 36 votos contra la medida y 22 a favor. A los discursos y testimonios de los referentes de trabajadores del reciclado de la ciudad, se unían varios legisladores quienes expresaron su apatía contra esta ley: “Quemar basura, mata, enferma, contamina el ambiente y es un negocio”, afirmó Myriam Bregman, diputada porteña del Frente de Izquierda.