Los docentes de todo el país preparan una jornada de actividades y medidas de lucha para el próximo miércoles 23 de mayo. En ese marco, la Unión de Trabajadores de la Educación decidió plegarse al paro docente convocado por la CTERA y participar de la Marcha Federal Educativa que culminará en Plaza de Mayo.
A raíz de la disconformidad por los ofrecimientos paritarios que en casi ninguna provincia superan el 15%, aumento que además pretende abonarse en cuotas, los docentes nucleados a nivel nacional en la Central de Trabajadores de la Educación de la República Argentina realizarán un paro nacional docente y serán protagonistas de la segunda Marcha Federal Educativa a Plaza de Mayo. Las consignas de la movilización incluirán el reclamo por la paritaria nacional, la resolución de los conflictos provinciales, la defensa de los 29 Institutos de Formación Docente que pretende cerrar el ejecutivo porteño, salarios dignos y una nueva Ley de Financiamiento Educativo.
El plenario de delegados y congresales de la UTE resolvió por amplia mayoría lanzar un plan de acción para exigir la inmediata recomposición salarial que compense la pérdida de poder adquisitivo de los y las docentes de la CABA y la convocatoria a la paritaria nacional docente para solucionar los conflictos provinciales. El plan de acción incluye asambleas e instancias de debate en las escuelas respecto de la situación educativa en la ciudad y el país, caravanas por vacantes y acompañar el paro y la movilización del 23.
Los principales gremios de la Ciudad -UTE y Ademys- reclaman un 24% de aumento para 2018. La administración porteña ofreció apenas un 15% en tres cuotas. Quince de los diecisiete gremios estatales porteños firmaron el acuerdo, pero UTE y Ademys la rechazaron por considerarla «insuficiente».