Dos niños, de 5 y 8 años de edad, que salían de la escuela ayer por la tarde en Lugano, fueron atropellados por el Premetro cuando se dirigían a su hogar en el barrio Papa Francisco. Los menores son hermanos y pertenecen a una familia de nacionalidad boliviana, aunque el único responsable a cargo de su cuidado es el padre, quien se encontraba trabajando al momento del accidente. El hecho ocurrió a la altura de la Avenida Fernández de la Cruz y Pola, y tanto las organizaciones del barrio como el propio sindicato de Metrodelegados denuncian que esto se debe, entre otras cosas, a la falta de señalización en la zona.
«Lamentablemente es bastante común este tipo de accidentes», dijo Viviana, integrante de la Red de Lugano, en diálogo con El Grito del Sur. «Es bastante caótico el tema del Premetro: pasa por escuelas y no hay nadie que se ocupe del tránsito», agregó. La falta de senderos escolares, la inexistente señalización y el trazado ferriovario que, a diferencia de otros servicios, no está en elevación, son algunos de los puntos principales que le reclaman a la administración de Horacio Rodríguez Larreta. «Cuando los hechos pueden evitarse no son accidentes», rezaba el comienzo del comunicado que difundió la Red a través de Facebook.
De momento el niño de 8 años se encuentra fuera de peligro, pero a su hermano menor debieron amputarle una pierna. Ambos fueron trasladados al Hospital Santojanni luego de lo ocurrido, pero como allí no podían operar al más chico, lo llevaron al Garrahan, donde no pudo ser recibido por falta de lugar y finalmente terminó internado en el Hospital General de Niños Pedro de Elizalde, desde donde continúa siendo tratado.
«Le venimos exigiendo a SBASE y al Gobierno de (Horacio) Rodríguez Larreta que el trazado del Premetro sea en elevación como en el ferrocarril Belgrano Sur, el Mitre o el San Martín. Esto es consecuencia de la no inversión en el sistema público en barrios obreros», expresó a través de su cuenta de Twitter el área de Salud Laboral de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP).
La integrante de la Red de Lugano también contó a este medio que paradójicamente ayer por la mañana se encontraban realizando una protesta en el Hospital Grierson, a dos cuadras del lugar donde fueron atropellados los menores, para exigir la finalización de las obras y así poder hacer uso pleno de las instalaciones. Dicho edificio podría haber recibido a los niños si contase con las condiciones habilitantes para hacerlo.
Sin embargo, no es la primera vez que estos dos hermanos deben sufrir las consecuencias de las políticas del Gobierno de la Ciudad: en 2017 ambos se quedaron sin vacante para ingresar en una escuela pública del barrio donde viven, Villa 20. Finalmente, gracias a los reclamos que realizaron, consiguieron una vacante en una escuela fuera de la villa. «La Comuna 8 es la que presenta los indicadores más alarmantes: en la que a lxs niñxs suelen asignarles escuelas lejanas a sus domicilios (por falta de vacantes en la zona), donde muchxs de ellxs deben manejarse solxs desde pequeñxs (por explotación laboral hacia lxs adultxs) y donde se caminan largas distancias para llegar, por ejemplo, a un hospital», detalla el comunicado.
