La Asamblea de Residentes y Concurrentes de CABA, uno de los sectores más precarizados que viene sosteniendo los hospitales públicos durante la pandemia, alertó sobre el inminente «colapso» del sistema sanitario porteño. Este llamado de atención se produce mientras el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta se prepara para reabrir algunas actividades sociales con vistas a una nueva flexibilización de la cuarentena, que podría incrementar aún más los casos de coronavirus en semanas que se avizoran como críticas.
En un comunicado difundido ayer por la tarde, la Asamblea explicó que «el aumento de casos está llevando a los efectores públicos de CABA al desborde. Las terapias intensivas colapsan, y en muchos hospitales pacientes graves terminan siendo atendidos en guardias y salas no preparadas para cuidados intensivos prolongados, por falta de equipamiento y, sobre todo, personal». Cabe destacar que el último relevamiento que llevó a cabo la Asamblea dio cuenta que la Ciudad de Buenos Aires cuenta con 263 camas de UTI en total, cuando el Gobierno porteño declara que existen 400.
La situación laboral de residentes y concurrentes, que alcanzó su pico de reclamos a finales del año pasado, se fue agravando al calor del avance de la pandemia. Lxs primerxs cobran entre 162 y 300 pesos la hora, con un contrato de exclusividad, mientras que lxs segundxs están obligados a trabajar sin salario ni ART. «Estamos en las mismas condiciones que antes en términos de derechos y salario, pero con jornadas más extensas y con más sobrecarga. A los que egresábamos en mayo nos extendieron de manera obligatoria el contrato sin aumento salarial. Y los concurrentes están obligados a trabajar gratis», señaló a este medio Rocío Rodríguez, residente del Hospital Ferrer e integrante de la Asamblea.
El comunicado agregó que «la falta de protocolos centralizados, capacitación, falta de personal, recursos y camas nos tienen hoy a lxs trabajadorxs de la salud como rehenes. Nuestro trabajo se ha convertido en ser tapa-baches de todos los emergentes que surgen a cada instante. Tenemos compañerxs sobrecargadxs de tareas, realizando guardias extenuantes sin que sean remuneradas». A esto se le suma que más de 500 trabajadores y trabajadoras de la salud ya fueron contagiados de COVID-19.
En ese marco, ayer tuvo lugar una jornada nacional de lucha de la que participaron residentes y concurrentes para reclamar por la sobrecarga laboral, los contagios, la falta de apertura de paritarias y el no cobro del bono. Debido a la ausencia de información oficial sobre la situación de los hospitales en la Ciudad, se espera que las próximas semanas sean «terribles». «Las medidas que se tomaron fueron cosméticas, no hubo un reforzamiento del personal capacitado para atender tantos casos, y no es verdad que los efectores estén preparados. Vamos a sufrir los trabajadores y las trabajadoras con sobrecarga y más contagios, lo mismo va a suceder con los pacientes», concluyó Rocío Rodríguez.
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