El proyecto de ley, presentado por el presidente de la Cámara de Diputados Sergio Massa, propone eximir del pago del impuesto a las ganancias a las y los trabajadores cuya remuneración mensual bruta sea inferior a $150.000. La semana pasada comenzó a debatirse el tema en plenarios de las comisiones de Legislación del Trabajo y de Presupuesto y Hacienda, que presiden Vanesa Siley y Carlos Heller respectivamente.
De aprobarse la nueva norma, 1.070.000 trabajadores/as y cerca de 216.000 jubilados/as quedarían exentos del pago de dicho impuesto. ¿Qué dicen los dirigentes sindicales al respecto? Si bien en un primer momento algunos gremialistas propusieron cambios al proyecto original, lo cierto es que en el plenario de comisiones celebrado el viernes pasado, las y los referentes de las centrales (CGT, Corriente Federal, Frente Sindical y las dos CTA) manifestaron de forma unánime su apoyo al proyecto que modificará la ley impositiva.
Por su parte, el diputado nacional Carlos Ortega -de extracción sindical- dijo a El Grito del Sur que “este proyecto es un avance extraordinario” y “lo importante es que más de un millón de asalariados quedarán exceptuados de este tributo”. Además agregó que “del 20% de trabajadores y trabajadoras que actualmente pagan este impuesto pasarían a pagarlo solamente el 7%. Y del 6% de jubilados y jubiladas pasarían a pagar la mitad, el 3%”.
¿Qué ocurrirá con los salarios que superen por poco el “piso” no imponible? El proyecto en tratamiento plantea que en el caso de las y los trabajadores cuyo salario mensual bruto supere los $150.000 pero no exceda los $173.000, se facultará al Poder Ejecutivo Nacional para fijar un gravamen que evite que la carga tributaria licúe abruptamente el poder adquisitivo. El diputado Ortega, quien además conduce el sindicato de ANSES, dijo que “para estos casos propusimos otro tipo de actualización, porque la que está contemplada en el proyecto original es en base al RIPTE, un índice que se actualiza anualmente. Pero desde el movimiento sindical pedimos que se actualice igual que la ley de movilidad jubilatoria, cada tres meses”.
Complementariamente, el proyecto prevé que las y los jubilados paguen el impuesto a las ganancias cuando su ingreso mensual supere la suma de ocho haberes mínimos -actualmente está fijado en seis-. Es decir que si se sanciona la ley, tributarán sólo aquellos y aquellas que superen los $152.000 de jubilación mensual. Por otra parte, la aplicación será de carácter retroactivo a enero, febrero y marzo de 2021. En este sentido, quienes hayan pagado ganancias en esos meses recibirán su respectivo reintegro. Asimismo, el aguinaldo (SAC) quedará exento del tributo.
Una iniciativa que busca reactivar el consumo y el mercado interno
El proyecto de ley para modificar el impuesto a las ganancias llega a la Cámara de Diputados en un contexto de creación del Consejo Económico y Social, un espacio de concertación de intereses impulsado por el Ejecutivo con el fin de acordar, con empresarios y sindicalistas, un equilibrio sostenido entre los precios y los salarios. En la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, el presidente Alberto Fernández dijo que su vocación es “que los ingresos de los que trabajan crezcan y rindan más”. Y para eso le pidió al cuerpo legislativo “que apure el tratamiento de la ley que facilitará la reducción del impuesto a las ganancias en los salarios”. “Si lo hacemos, más de 1.200.000 argentinos quedarán liberados de pagar ese tributo. Quienes trabajan y quienes se han jubilado se beneficiarán y con ello recuperarán su capacidad de compra”, afirmó.
Si el Congreso aprueba esta ley, se calcula que el Estado dejará de recaudar 55.000 millones de pesos. “Parte del poder adquisitivo de bolsillo que recuperarán los trabajadores irá destinado al consumo interno. Entonces, estimamos que el 20% de esos 55.000 millones se recuperarán a partir de otros impuestos, como por ejemplo el IVA”, dijo el diputado Ortega a este medio. Y concluyó: “Este proyecto al eximir a más de un millón de trabajadores del pago de ganancias generará un ciclo reactivador, con lo cual habrá mayor consumo y con ello el Estado podrá recaudar de otros tributos”.
Actualmente pagan el impuesto a las ganancias el 25,6% de asalariados/as y jubilados/as. Con las modificaciones se estima que esa cifra se reducirá al 10% de contribuyentes, alcanzando un porcentaje similar al del año 2014. En cuanto a los datos por provincia, se estipula que en Buenos Aires dejarían de pagar este impuesto el 67% de las y los trabajadores, jubilados y jubiladas que lo deberían abonar a partir de enero de 2022. Este porcentaje se eleva a cerca del 80% para provincias como Formosa, Jujuy, La Rioja y Santiago del Estero.
Hasta el momento hubo tres plenarios virtuales en Comisiones que, como es habitual, se televisaron en vivo por el canal Diputados TV. En la apertura del debate parlamentario, celebrado el martes pasado, expusieron el ministro de trabajo Claudio Moroni y la titular de AFIP Mercedes Marcó del Pont. Durante el segundo plenario, realizado el jueves, expusieron distintos contadores y especialistas en materia impositiva. El viernes, en el tercer encuentro, fue el turno de los referentes sindicales de las centrales obreras: CGT Azopardo, Corriente Federal, Frente Sindical y las dos CTA. Las y los dirigentes gremiales apoyaron el proyecto y se mostraron conformes con la iniciativa.
