Gabriel Boric, el joven que busca subir a Chile a la ola progresista

🇨🇱 El candidato de apenas 35 años tendrá como principal contendiente a Sebastián Sichel, exministro de Piñera. Perfil del joven izquierdista surgido de las entrañas del movimiento estudiantil y perspectivas electorales en un Chile condenado al cambio.

El pasado domingo, Gabriel Boric (Frente Amplio) obtuvo 1.047.616 votos en las elecciones primarias de Chile y venció por amplio margen -60,24% a 39,76%- a Daniel Jadue (Partido Comunista). Con este resultado, en las elecciones generales del próximo 21 de noviembre enfrentará a Sebastián Sichel, exministro de Desarrollo Social del gobierno de Sebastián Piñera. Con apenas 35 años, el joven candidato izquierdista es -junto a Camila Vallejos y Giorgio Jackson, entre otros-una de las figuras emergentes de las movilizaciones educativas de la década pasada en un país donde la privatización de la educación ha alcanzado niveles exorbitantes.

Máxima figura del Partido Convergencia Social, que integra el Frente Amplio, Boric asumió en 2014 como miembro de la Cámara de Diputados por la región de Magallanes (Patagonia chilena) jactándose de su «independencia», luego de resultar electo sin el apoyo de las dos grandes coaliciones que han gobernado Chile desde la restauración democrática en 1990. Por ese entonces, reivindicaba la experiencia de Podemos en España y aspiraba a conformar una nueva alternativa de izquierda siendo crítico de la segunda administración de Michelle Bachelet: «Llegó a La Moneda con un programa moderado que busca humanizar un neoliberalismo desbocado más que realizar reformas estructurales».

En el corto plazo, los desafíos de la izquierda chilena tienen que ver con limar asperezas de cara a una verdadera unidad. La interna de la coalición electoral Apruebo Dignidad dejó heridos y acusaciones cruzadas: en uno de los debates, Jadue acusó a Boric de dar su apoyo en 2019 a la ley antibarricadas, enmarcada en la agenda represiva del gobierno de Piñera tras el estallido social de octubre. En la campaña electoral también se colaron las miradas contrapuestas por las protestas en Cuba, puesto que Boric planteó que en la isla socialista no se está respetando el derecho a la manifestación y se solidarizó con «el pueblo cubano que se levanta por mayores libertades», aunque también condenó el bloqueo estadounidense. Tras reconocer su derrota en las urnas, Jadue hizo una autocrítica en este sentido: «Si algún día esperamos que la izquierda, nuestra izquierda, gobierne Chile de verdad, vamos a tener que cambiar de manera radical el comportamiento entre nosotros».

Si se observan los números de las primarias, las perspectivas electorales para la izquierda chilena son alentadoras. En primer lugar, estas primarias tuvieron la mayor participación en su historia: ya con el 99,9% del escrutinio se contaban un total de 3.143.006 votos, contra los 3.010.890 sufragios de 2013, proceso que ostentaba hasta hoy la mayor convocatoria. En segundo lugar, Sichel -representante de Chile Vamos- fue primero en la coalición derechista pero tercero en las primarias, dado que acumuló 659.416 votos (33.162 menos que los del comunista Daniel Jadue y 398.151 menos que Gabriel Boric).

«Si Chile fue la cuna del neoliberalismo, también será su tumba», remató Boric tras su triunfo, que representa un guiño a la renovación generacional y al ocaso de la política tradicional que derivó en la irrupción de independientes y grupos ciudadanos en su mayoría de izquierda en la pasada elección constituyente. El próximo presidente de Chile tendrá ni más ni menos que la responsabilidad de acompañar el nacimiento de una nueva Constitución que destierre el período neoliberal abierto por Augusto Pinochet. Precisamente, el joven candidato presidencial militó fervientemente por una nueva carta magna en Chile mediante el mecanismo de Asamblea Constituyente «100% electa». En ese marco, también mostró su faceta más negociadora con sectores del oficialismo para alcanzar la firma del Acuerdo por la Paz Social y la Nueva Constitución, lo cual fue entendido por sus detractores como «contrario en esencia a las demandas que las diferentes y diversas manifestaciones han enunciado en las calles».

Compartí

Comentarios

El Grito del Sur

El Grito del Sur es un medio popular de la Ciudad de Buenos Aires.
Fundado el 23 de septiembre de 2012 en el natalicio de Mariano Moreno.