Precarización, alta demanda y sueldos bajos. Esta es la situación que vive el personal de salud en la Ciudad de Buenos Aires, el distrito más rico del país. Tras un año y medio de pandemia, bajo la consigna «Martes 13: sueldos de terror», les profesionales de la salud vuelven a salir a las calles para hacer escuchar sus reclamos. Salarios dignos, mejores condiciones laborales y el cese de los recortes a las concurrencias son solo algunos de los pedidos que enarbola la Asamblea de Residentes y Concurrentes que esta mañana se movilizará a la Jefatura de Gobierno para hacer escuchar sus exigencias. «La situación general es angustiante», explica Agustín Labourt, médico residente de 4to año del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez. «Lo que hoy estamos reclamando es una deuda que viene desde hace tiempo y lleva varias instancias de lucha», asegura a El Grito del Sur.
«Vamos aproximadamente 500 días de pandemia y desde el primer momento se suspendieron todas las licencias, tanto por vacaciones como por otra causa. En contraposición, hemos tenido mucho más desgaste, hemos trabajado el doble de nuestro tiempo, estuvimos aislados, al igual que todos y un poco más», agrega el profesional.
La protesta del día de hoy fue convocada inicialmente por la Asociación de Médicos Municipales (AMM), sindicato que maneja una silenciosa pasividad ante los recortes en salud del gobierno de Larreta y que, consultados por este medio, prefirieron no dar declaraciones. «El paro surge excepcionalmente de AMM -entidad gremial que convoca a los médicos-, pero también está respaldado por la Asamblea de Residentes y Concurrentes. Expresa los reclamos de todo el arco del personal de salud», señala Labourt.
«Hoy estamos movilizándonos para Jefatura de Gobierno porque hace más de 500 días que no tenemos licencias, solamente nos podemos tomar cinco días pero se nos descuenta el bono de 6.500 pesos que se nos dio, es una falta de respeto total», señala Cynthia Slaifstein, médica del Hospital de Niños. «No tenemos paritarias y se cerraron puestos de concurrencia, así que no nos quedó otra que convocar a un nuevo paro», suma la profesional de la salud.
Les residentes saben de lucha. Hace apenas dos años, una masiva movilización que incluyó asambleas y cortes de calle logró ponerle un freno a la iniciativa de Horacio Rodríguez Larreta que buscaba modificar el régimen laboral y de cursada. Ahora, a la lucha salarial y por condiciones dignas se le suma el reclamo contra el ajuste de concurrencias. «La concurrencia es una instancia de formación de posgrado similar a la residencia, sólo que lamentablemente no gozan de muchos derechos», explica Labourt. «El GCBA, en línea con el deterioro del sistema de salud, quiere recortar profesionales de concurrencias, lo que implicaría menos profesionales adecuadamente formados en el sistema de salud», añade. La denuncia tiene fundamento: el Gobierno de la Ciudad amenaza con recortar 350 puestos para especialidades médicas y no médicas del sistema público.
«Hoy los hospitales municipales funcionan como guardia, como un fin de semana», explicita Slaifstein. «Necesitamos que se nos escuche, poder dialogar con la gente de Ciudad para que realmente haya un cambio porque está siendo devastado nuestro sueldo y nosotros estamos agotados mental y físicamente. Necesitamos que se visibilice nuestro reclamo y nos apoyen», concluyen les residentes.