Bajo Flores: las mujeres y diversidades reclaman un CIM en el territorio

🙋‍♀️Organizaciones populares y feministas del barrio Padre Ricardelli reclaman la creación de un CIM en el Bajo Flores.

El Movimiento de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans, Bisexuales y No Binaries de la Comuna 7 presentó, el martes 21 de julio en la Legislatura porteña, un proyecto para la creación de un Centro Integral de la Mujer (CIM), en el Barrio Padre Ricciardelli (ex villa 1-11-14). La legisladora Lucía Cámpora, del Frente de Todos, se interesó inmediatamente por el proyecto.

La ley 5466/2015 de Prevención de la Violencia Familiar y Doméstica establece que se debe constituir un CIM cada 50.000 mujeres. La Comuna 7, integrada por Flores y Parque Chacabuco, tiene -según censo de 2010- 220.591 habitantes, conformados por 118.110 mujeres y 102.481 hombres. Teniendo en cuenta estos números y destacando la relevancia de las políticas locales y de cercanía, la agrupación de mujeres y diversidades que presentaron el proyecto buscan subsanar la deuda del gobierno porteño: la Comuna 7 necesita otro CIM y justamente allí donde se encuentra la población más vulnerable y desprotegida.

“Este proyecto fue creado por organizaciones populares y personas que viven en esa comuna y detectaron la necesidad”, recalcó Jazmín Bergel, asesora de la legisladora Ofelia Fernández. En un barrio donde el censo 2010 arrojó un 2,3% de población con hacinamiento crítico y 8,6% con necesidades básicas insatisfechas, la violencia doméstica encuentra tierra fértil. Por esto, el actual CIM ubicado a más de 3 kilómetros del bajo Flores, resulta inaccesible para las mujeres y diversidades que están sometidas a una cadena de violencias: por sus parejas, económica, por discriminación, por ser pobres, extranjeras o diversas.

En los CIM se ofrece contención, acompañamiento y acceso a derechos, implementando herramientas para cada caso particular; efectúan articulación y coordinación con otras áreas del Gobierno de la Ciudad y también con organizaciones comunitarias, por lo cual es indispensable que se encuentren en los territorios, “ajustándose a las realidades de los barrios populares”, reclamó Mónica Saucedo, una de las autoras del proyecto junto con Nani D’Amico, Julia Barrio y Ayelén Cura, quienes participan de todos los eventos de la Comuna 7 para informar sobre la necesidad de este CIM. Tienen además un Facebook (Movimiento de Mujeres y Diversidades Comuna 7) donde se puede tomar contacto con ellas.

La aplicación parcial de las leyes es una forma más de injusticia y desigualdad social, trampa típica de los gobiernos neoliberales que basan su accionar en políticas de maquillaje. Un ejemplo es la gestión actual de la ciudad de Buenos Aires, a causa de un gobierno más ocupado en promover proyectos arquitectónicos excluyentes que en preservar la salud de las mujeres y diversidades que día a día habitan la ciudad.

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