Facundo Moyano comunicó este jueves su renuncia al cargo de diputado nacional por el Frente de Todos. Después de 10 años en la Cámara Baja, el joven dirigente, fundador del Sindicato Único de Trabajadores de Peajes y Afines (Sutpa) e hijo del histórico líder de Camioneros Hugo Moyano, dejará de ser parte del bloque oficialista dos años antes del fin de su mandato. Su salida disminuye a 12 la cantidad de diputados de origen sindical en el Congreso y en su lugar asumirá Lucio Yapor, militante de La Cámpora de Chivilcoy.
“Mi ideal es una Argentina con pymes, comercios e industrias que generen empleo y hoy considero que puedo contribuir mejor a eso fuera del Congreso”, sorprendió el ahora exdiputado a través de un comunicado en su cuenta de Twitter. “No podemos conformarnos con un país que tiene un índice de pobreza de más del 40% y una informalidad laboral del 50%”, disparó en un tono crítico y aseguró que fuera del ámbito parlamentario redoblará su compromiso para combatir la precarización laboral en los sectores público y privado.
La renuncia tomó por sorpresa a propios y extraños a un mes de las PASO y luego de que el Gobierno nacional diera el visto bueno para avanzar en un proyecto de ley, presentado por el mismo Moyano, que propone crear una empresa estatal (con participación sindical en el directorio) que administre las autopistas Panamericana y Acceso Oeste. Los contratos de concesión de ambas rutas que el macrismo le renovó a la empresa española Abertis son investigados por la Justicia. Además, dichos contratos fueron declarados “ilegítimos” por el Gobierno a raíz de una auditoría que finalizó la semana pasada y en la cual se comprobaron irregularidades y maniobras fraudulentas cometidas al momento de la extensión de las concesiones. Con este escenario estaba todo dado para que la iniciativa de estatización de las autopistas comience a debatirse en comisiones.
«En estos casi 10 años como diputado presenté cientos de proyectos para proteger a los trabajadores y garantizar más derechos y también numerosas iniciativas para mejorar la seguridad vial. Proyectos para crecer, que deseo mis compañeros legisladores hagan valer y puedan sacar adelante», resumió a través del comunicado.
Facundo Moyano nació en Mar del Plata el 25 de diciembre de 1984 y a los 26 años de edad asumió por primera vez como diputado nacional por la Provincia de Buenos Aires integrando la lista del Frente para la Victoria. Desde entonces se mantuvo en el cargo, aunque a partir de 2013 formó parte de diferentes armados políticos por fuera del kirchnerismo debido a la ruptura temporal de la alianza entre su padre y Cristina Fernández. Su última renovación fue en los comicios de 2019 como integrante del Frente de Todos y, por lo tanto, su mandato vencía en 2023.
En medio de un hermetismo inusitado y sin certezas sobre los motivos de fondo que motivaron la renuncia, se abre un interrogante en la relación entre la familia Moyano y el Gobierno nacional, en un año en donde, además de las legislativas, se celebrarán las elecciones para renovar el Consejo Directivo de la CGT. La prórroga de la extensión de los mandatos sindicales que rige desde que arrancó la pandemia venció a principios de agosto y a partir del 1 de septiembre cada organización debería fijar una fecha para llevar a cabo los correspondientes actos electorales, incluyendo el de la CGT. Si bien aún no hay una fecha definida, está consensuado entre todas las corrientes que el congreso para renovar autoridades de la central obrera se realizará en el mes de octubre.
Es sabido que Hugo Moyano apunta a quedarse con la conducción cegetista, pero la disputa no es tan simple. El dirigente camionero sabe que aún le falta sumar adhesiones de otros sindicatos de peso para poder desplazar a Héctor Daer de la cúpula, sobre todo porque el dirigente del sindicato de Sanidad tiene la venia del propio presidente Alberto Fernández para continuar siendo la máxima autoridad de la central.
Por otra parte, la familia Moyano intentó impulsar a Karina Eva -también hija de Hugo y secretaria de Género de Camioneros- como candidata a diputada nacional en estas elecciones, pero finalmente no fue incluida en la lista. Por el contrario, la hija de Héctor Daer, Maia, competirá por un lugar en la Legislatura porteña luego de ser incorporada en la lista como cuarta precandidata. Este hecho tensionó la relación del dirigente camionero con la Casa Rosada y se estima que pudo haber sido uno de los detonantes que motivó la salida de Facundo, con el objetivo de mostrar el descontento y reagrupar fichas para meterse de lleno en la disputa sindical.
En esta dirección, Facundo Moyano retomará el mando -a tiempo completo- del Sindicato Único de Trabajadores de Peajes y Afines (Sutpa), organización que condujo entre 2006 y 2017, y de la cual también fue uno de sus principales fundadores en un contexto signado por el impulso estatal a las organizaciones sindicales bajo la presidencia de Néstor Kirchner. El retorno al espacio que lo impulsó a la vida pública ya tiene dos objetivos definidos: negociar una paritaria que supere el 50% de aumento y conducir un nuevo armado de sindicalistas «sub 55» para promover la renovación generacional en el mundo sindical.
Otra de las hipótesis que circula con fuerza, se basa en que el joven dirigente dirigente buscaría apuntalarse -nuevamente- como líder del Sutpa para desde allí ampliar el arco de alianzas estratégicas con otros gremios de cara al congreso de la CGT, en el cual el Frente Sindical que encabeza su padre irá en búsqueda del mando de la central.
Además, se abre la posibilidad de que Facundo se meta de lleno en la discusión para renovar autoridades de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), que actualmente conduce Juan Carlos Schmid (Sindicato de Dragado y Balizamiento). El congreso para elegir a la nueva conducción de la institución que nuclea a empresas y gremios del transporte será el próximo 7 de octubre en el polideportivo del Sindicato del Seguro.
