Los movimientos sociales decidieron finalmente suspender la movilización pautada para esta tarde a Plaza de Mayo, que había sido convocada ayer en apoyo al presidente Alberto Fernández luego de las renuncias sincronizadas de más de diez ministros y funcionarios de primera línea -todos del riñón del kirchnerismo- al gabinete. El secretario gremial de la UTEP, Gildo Onorato, negó en diálogo con El Grito del Sur que la suspensión haya sido un pedido de la Rosada y disparó contra los dirigentes que pusieron a disposición sus cargos: “Suspendimos la marcha por responsabilidad institucional, la que no tuvieron quienes presentaron su renuncia en los medios”, aclaró.
“Fue una decisión propia de las organizaciones, luego de evaluar que es prioritario conservar la unidad del Frente de Todos, dejar las intrigas palaciegas y de la política y enfocarnos en los problemas que el pueblo nos pidió en las urnas que resolvamos”, definió Onorato, también dirigente del Movimiento Evita, que ayer salió a apoyar con fuerza a Fernández.
El Presidente agradeció la iniciativa, pero dejó en claro su preferencia respecto de la convocatoria. «Valoro el gesto de las organizaciones sociales y de todos los que me manifestaron su afecto impulsando una movilización en mi apoyo», twitteó este mediodía. «Aun así, prefiero que toda esa fuerza que implica una movilización de esa magnitud se canalice para construir la épica militante que ayude a argentinos y argentinas a desentrañar el dilema que se nos plantea en noviembre», dijo.
La agrupación que conduce Emilio Pérsico había sostenido ayer, al calor de la crisis institucional del Gobierno y tras la derrota del domingo en las PASO, que “el mensaje autocrítico, conciliador y racional expresado por el Presidente es la dirección correcta que debemos tomar para escuchar las demandas de nuestro pueblo. Creemos que la discordia poco ayuda a la reconstrucción de un país que está atravesando una de las peores crisis de nuestra historia. Recordemos lo que dice nuestro querido papa Francisco: nadie se salva solo”. Una apuesta fuerte a mantenerse cerca de Fernández.
En la misma sintonía, Onorato remarcó en diálogo con este medio que la puesta a disposición de las renuncias inauguradas por el ministro del Interior, Eduardo Wado de Pedro, “son irresponsables y debilitan al Gobierno en un momento en que el Frente tiene que estar unido para mejorar nuestra performance electoral”. “Creo que los compañeros deberían reflexionar sobre ese método de trabajo y nosotros sobre cómo mejorar la situación de los movimientos populares”, agregó.
“La derrota era previsible, quizás en la euforia de la campaña no se vio venir, pero las causas de la derrota estaban sobre la mesa. La crisis económica es grave y lo extraordinario hubiese sido ganar. El problema del trabajo, de los alimentos, de la salud y la educación son los principales problemas que tiene la población y en los cuatro hemos tenido dificultades. Sin embargo, creo que tenemos posibilidades de mejorar en las generales y también de afrontar esos problemas estructurales en los próximos años. Hay que tener paciencia, ninguna medida espasmódica va a solucionar los problemas de fondo. No hay recetas mágicas”, concluyó Onorato.
