“Y lo más importante de todo. Hace dos años y medio que a la Ciudad le falta un policía. No nos hemos cansado de pedir por la aparición de Arshak (Karhanyan). Hoy me acompaña su mamá, en la tribuna. En dos años y medio no fue recibida por el Jefe de Gobierno y necesita una respuesta”. En una de sus primeras intervenciones, el candidato a diputado nacional por el Frente de Todos porteño, Leandro Santoro, expuso durante el debate electoral el caso de Arshak Karhanyan, el policía de la Ciudad de origen armenio que lleva 30 meses desaparecido sin que la Justicia, hasta ahora, haya avanzado en una hipótesis certera sobre su paradero. La presencia en los estudios de TN de Vardush “Rosita” Datyvian, mamá de Arshak, ya había generado un primer cruce en la previa, según confiaron fuentes cercanas al candidato a El Grito del Sur: la producción del show había recibido su nombre por la mañana como parte de la lista de invitados, pero una hora antes del inicio había sido borrado sorpresivamente, lo que generó malestar y discusiones subidas de tono fuera de las cámaras.
La incomodidad de María Eugenia Vidal con el tema quedó expuesta al aire. La candidata de Juntos por el Cambio recogió el guante y se “lamentó” por el supuesto “uso político” del caso por parte de Santoro, dirigiéndose directamente a Vardush, quien no pudo intervenir al aire pese ser nombrada no una, sino dos veces. La acusación de Vidal no es nueva: retoma alguna de las críticas que en el mismo sentido recibió por lo bajo el presidente Alberto Fernández desde que recibiera a la familia del efectivo desaparecido en la Casa Rosada, a fines de agosto, foto incluida. El mismo gesto repitió más tarde ante la comunidad armenia. Pero lo cierto es que, tal como denunció Santoro, el propio Horacio Rodríguez Larreta, en última instancia responsable político de la policía porteña, no tomó el mismo compromiso. Apenas hubo un encuentro post-PASO con el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Marcelo D’Alessandro, que se mantuvo a puertas cerradas.
D’Alessandro y la querella piensan muy distinto sobre qué pudo haberle sucedido a Arshak. El ministro habló por primera vez a fines de agosto sobre el tema, y aseguró que confía en el rumbo de la causa y en la participación de la propia Policía en la investigación. Para “Rosita” y el resto de la familia, la cuestión es bien distinta: creen que en el expediente se acumulan decenas de indicios de que la Policía estuvo involucrada en la desaparición y pidió más de una vez que sea otra fuerza la que investigue un posible crimen. Lo mismo pensaba el fiscal Santiago Vismara, a quien el juez le quitó el manejo de la investigación por haber mandado a allanar dependencias de la Policía y pidiera la imputación de cuatro agentes sospechados de tener algo que ver con el destino de Arshak.
La familia también insistió, acompañada por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, en que la causa fuera caratulada como “desaparición forzada de persona”, lo contrario a lo que por ahora cree el juez a cargo, Alberto Baños. “No confío en él”, dijo Verdush recientemente en una entrevista con Télam. La Cámara de Apelaciones, hace tres semanas, le dio la razón al juez y rechazó cambiar la carátula y la incorporación de la secretaría que conduce Horacio Pietragalla como querellante. La fiscalía presentó un recurso extraordinario en contra, pero la decisión de Cámara tendrá el efecto de congelar el avance de la causa al menos por unos largos meses.
Uno de los efectivos imputados por el fiscal es Leonel Herba, la última persona que según el expediente habría visto con vida a Karhanyan, en la puerta del edificio donde vivía, en el barrio de Caballito. Una grabación que publicó hace más de un mes el diario Página/12, tomada del celular de Herba, da cuenta de una discusión del agente con su pareja, en la que ésta le dice: «Vos seguí haciendo desaparecer gente(…) el que está acá en orsai porque desapareció una persona y sos el principal sospechoso, sos vos».
“No sabemos nada del agente Arshak. Jamás vimos a ningún funcionario del Gobierno de la Ciudad ponerse al frente de su búsqueda, ni hacer el más mínimo esfuerzo por buscarlo. Ni siquiera hay fotos de Arshak en los patrulleros, a pesar de que es un miembro de esa fuerza. La Policía de la Ciudad es responsable, borró todos los datos de sus computadoras y celulares, “perdieron” las cámaras del día de su desaparición. Ya no queda ninguna duda que es un caso de desaparición forzada de personas. Denunciamos la responsabilidad de la Policía de la Ciudad, queremos saber quiénes son los responsables. Queremos Memoria y Verdad”, dijo a este medio la legisladora Victoria Montenegro, presidenta de la Comisión de DDHH de la Legislatura, al cumplirse los primeros dos años de la desaparición de Arshak.
