Este sábado se cumplen ocho años del incendio y derrumbe del depósito que la firma multinacional Iron Mountain tenía en Azara 1245 y que dejó un saldo de ocho bomberos y dos agentes de Defensa Civil muertos. “Esta causa la sentimos los familiares, la sociedad es un poco sorda y sigue muda”, dijo a El Grito del Sur Sandra Barícola, hermana de Pedro, uno de los bomberos fallecidos. Pero este año el aniversario viene de la mano del estreno de En cumplimiento del deber, un documental dirigido por Jorge Gaggero que relata la tragedia sucedida en Barracas y remarca lo que los familiares gritan hace años: que el incendio fue intencional.
En la mañana del 5 de febrero de 2014, la propagación de las llamas en el depósito donde se almacenaba documentación de empresas y bancos provocó que la estructura metálica (columnas y cabriadas) que sostenía el techo cediera por las altas temperaturas y derrumbara la pared de la calle Jovellanos.
Como consecuencia de esto, fallecieron el comisario inspector Leonardo Day, la subinspectora Anahí Garnica, los cabos Carlos Veliz, Eduardo Adrián Conesa y Maximiliano Martínez, el agente Juan Matías Monticelli (del Cuartel I de Bomberos de la Policía Federal), los bomberos voluntarios Sebastián Ezequiel Campos y Facundo Ricardo Ambrosi (cuartel Vuelta de Rocha) y los rescatistas de Defensa Civil, Pedro Esteban Barícola y José Méndez Araujo.
Esta semana, un grupo de familiares de las víctimas fue recibido por el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández. “Fue una reunión muy buena, dinámica. Nos propuso trabajar en conjunto con su equipo para ayudarnos en la causa. En una reunión de media hora se hizo mucho más que en estos años -aseguró Barícola-. Hace ocho años que estamos esperando justicia y siempre pasa algo que tira la causa para atrás”.
La causa
En 2018, el juez de Instrucción 18 Pablo Ormaechea procesó a 17 de 23 imputados por «incendio culposo seguido de muerte». Esta decisión fue apelada tanto por las defensas como por la querella, esta última en relación a los cinco sobreseimientos.
“Procesaron a gente del Gobierno de la Ciudad; de la Agencia Gubernamental de Control; del directorio de la firma; a personal de seguridad e higiene y al vigilador, que es quien omitió un llamado de alerta temprano. Se comunicaron con el del sistema y dijo que los bomberos estaban en camino, cosa que no era cierta. Los bomberos supieron de lo que pasaba por testigos que llamaron al 911”, explicó a este medio Javier Moral, abogado de las familias y de bomberos que resultaron heridos en la tragedia.
En diciembre de 2020, la Cámara Nacional en lo Criminal anuló los procesamientos “por déficit de fundamentación”. “El juzgado pone ‘estrago culposo seguido de muerte’ y agrega: ‘dependiendo de la intencionalidad o no del incendio’. Y a la Cámara eso le llamó la atención porque si es doloso (si fue intencional) la pena es mucho mayor”, agregó el abogado.
Durante el año pasado se pidió que los bomberos, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), la Universidad Técnica Nacional (UTN) y los peritos de la defensa se reunieran para presentar el informe con los peritajes y sus conclusiones. “Eso se presentó este 17 de enero a pesar de la feria judicial y las defensas pidieron 30 días de prórroga para analizar todo”, dijo el abogado querellante y afirmó que esperan que vuelva a procesar a las mismas personas y “quizás por encima”.
Para Moral es evidente que se trató de un incendio intencional. En los peritajes y en la inspección ocular que hicieron en 2016 se detectó que en el depósito de Barracas había, entre otras cosas, acelerantes -que aumentan la voracidad del fuego- que “no podían estar en un lugar donde se explota papel”; que la cisterna de agua para extinguir un posible incendio estaba vacía; que la llave de paso del sistema secundario que tomaba agua de Aysa estaba cerrada. “Y la llave la sacaron, que no es como la de manijita que podés tener en tu casa, es como un volante gigante y necesitás herramientas especiales para sacarla. Todo eso para mí abreva a la intencionalidad”, enumeró el letrado.
Además, recordó Moral, distintas filiales de Iron Mountain alrededor del mundo, todas ellas sospechadas de tener documentación vinculada a la corrupción, sufrieron incendios similares.
“Macri durmió la causa cuatro años”
Cuando sucedió la tragedia, Barícola recordó que la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner se reunió con todos los familiares para darles su pésame y que contaron con el apoyo del Gobierno. “Pero Macri durmió la causa cuatro años, de esto no se hablaba. Pasamos muchas cosas porque fuimos una voz muy cantante en los medios, íbamos a todos los programas y cuando asumió Macri la presidencia nos sacaron de todos lados, no hablamos más hasta que vino este Gobierno”, aseguró.
Pero los intentos para intimidar y acallar a los familiares perduran: el domingo pasado, el santuario que hay en conmemoración a los héroes de Barracas fue vandalizado. “Consideramos que esto fue adrede porque se empezó a promocionar la película que habla de la corrupción, del lavado de dinero de Iron Mountain. Creemos que está todo digitado para acallarnos”, sostuvo la hermana del bombero.
Barícola está “motivada por el film” que se transmitirá este domingo a las 22 horas en Canal 9, pero admitió que “es un momento muy triste”. “Ellos murieron por corrupción, no por impericia como nos dijo (Juan José) Gómez Centurión (a cargo de la Agencia Gubernamental de Control de la Ciudad en 2014)”, remarcó.
Pedro, recordó su hermana, “era un ser de luz”, generoso. “Tenía un año menos que yo, lo extraño todos los días y el tiempo hace que lo extrañe con una sonrisa -dijo-. Hace ocho años que espero ver luz en esta causa. La Justicia está comprada y yo lo vivo en carne propia”.
