Treinta y tres artistas argentinas, en un homenaje a las Abuelas de Plaza de Mayo

🤍 La muestra federal “Marzo, Mujer y Memoria” se inaugura el jueves 17 en la Casa de la Cultura del Fondo Nacional de las Artes. Se presentó el lunes con la presencia de Estela de Carlotto.

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De lejos, parecen un montón de mosaicos de colores en tonos tierra, o rojos y negros, depende cómo les dé la luz o dónde se pare quien observa. De cerca, se ve el objeto real y sus costuras: son diapositivas dispuestas en hileras, filas de negativos prolijamente cosidos y, cada tanto, pequeñas radiografías de un cráneo, en su circularidad irregular. 

“Manto Memoria”, de Catalina Galdón, artista rionegrina, una obra de 2.50 metros, ocupa una pared e impacta al entrar en la sala de exposición en la Casa de la Cultura del Fondo Nacional de las Artes (FNA), en la calle Rufino de Elizalde, que funciona en la casona racionalista que perteneció a Victoria Ocampo.

La obra es una de las treinta y tres que conforman la muestra federal «Marzo, Mujer y Memoria», que reúne pinturas, videos, instalaciones, dibujos, esculturas y fotografías realizadas por artistas mujeres de todas las provincias argentinas, que rinden homenaje a las Abuelas de Plaza de Mayo, a cuarenta y cinco años de su fundación, y que se inaugura el jueves 17, a una semana de la conmemoración del último golpe cívico militar en la Argentina. 

Detalle de «Manto Memoria» de Catalina Galdón.

Al comienzo del recorrido, antes de entrar a la sala, la palabra “abuelas” en cursiva y luminosa se dibuja en una pared, una instalación de la artista neuquina Celeste Venica, con tiras de luces decorativas.

Ya adentro, protegida por una vitrina de vidrio, la escultura de la artista jujeña Cecilia Espinoza “Mamita de la buena memoria” representa a una mujer descalza, con un pañuelo blanco en la cabeza y una pancarta en la mano. El pañuelo es central también en «La peregrinación de los pañuelos blancos», un esgrafiado sobre tinta china de la artista Susana Sendón, de San Luis, así como en la pintura en técnica mixta «Anidar», de la artista catamarqueña Abigail Albornoz.

La tucumana Carlota Beltrame aporta láminas de plomo en su obra de nombre más que significativo: “Los años de plomo”, en tanto la chubutense Cristina Morales presenta dos cuadros con figuras enlazadas por sus títulos, que son dos preguntas centrales en la búsqueda de Abuelas: “Dónde?” “Están?” 

«Ni olvido ni perdón», obra de la artista porteña Diana Dowek, consiste en una camiseta estampada, realizada por el 20 aniversario de Abuelas.

Urbomaquia – Pancartas

La palabra (y no cualquier palabra) se entrelaza con las imágenes en una buena parte de las obras expuestas, ya sea escrita o en audio, como en el video «Madres y abuelas me salvaron» de la riojana Ayelén Argañaraz, compuesto por imágenes animadas realizadas en un rotoscopio, donde se sobreimprimen colores sobre un filme en blanco y negro en el que una abuela de Plaza de Mayo reclama por los nietos. O en el documental del colectivo cordobés Grupo Urbomaquia, con las pancartas exhibidas por los integrantes durante la marcha del 24 de marzo de 2002: allí se lee «Ni olvido ni perdón», «Justicia», «Por la memoria viva», «30.000 compañeros» y «Nunca más».

“Buscamos hacer un homenaje a las Abuelas, destacando su aporte cultural, que es enorme y está poco visibilizado, porque hablamos de la búsqueda de la identidad, pero además quisimos hacerlo a través de algo representativo de cada provincia. Porque lo que nos interesa es acentuar lo federal. Y juntar artistas de trayectoria con otras más jóvenes, emergentes”, dijo Diana Saiegh, directora del FNA, el lunes, en la presentación de la muestra, en la que participó Estela de Carlotto.

La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo agradeció a los artistas en el acto dedicado a los organismos de Derechos Humanos y dijo: “El arte es una bendición para nuestros sentimientos. El ejemplo de Argentina ha recorrido el mundo y éste es desde hoy un lugar histórico convertido para la lucha”.

En la antesala de la muestra, se ven las imágenes de doce Abuelas en retratos ilustrados del artista Andy Rivas para el libro Historias de abuelas, que forman parte de Ovillo de trazos, propuesta literaria que impulsa el FNA desde 2015, y que publicó el organismo cultural junto con La Casa por el Derecho a la Identidad de las Abuelas de Plaza de Mayo, que funciona en la ex ESMA. Entre otras, además de Carlotto, figuran Berta Schubaroff, Nélida Navajas, Delia Giovanola, Chela Fontana, Ledda Barreiro, Emilce Flores de Casado y Buscarita Roa. 

El acto fue cerrado por el ministro de Cultura Tristán Bauer, quien señaló: “Cultura es una palabra que viene de cultivar. Y hay que seguir cultivando la lucha por la paz”.

Hace algunos días, algunas de las artistas participantes reclamaron un pago por exponer, y agitaron el reclamo desde las redes. “El FNA se hizo cargo del transporte y el seguro de las obras, pero en las muestras no se paga a los expositores por participar. De todos modos, subimos el reclamo al directorio y fue imposible vehiculizarlo, ya que el sistema legal impide pagar sin ir a concurso, pero sí las convocamos a una reunión luego de la inauguración para organizarse”, explicó Saiegh. El debate, que ya viene generándose desde colectivos de artistas, queda abierto.

La exposición se inaugura el jueves y permanecerá abierta hasta el 17 de abril de jueves a domingo de 14 a 19, con entrada gratuita y sin necesidad de inscripción previa, en la Casa de la Cultura del FNA, Rufino de Elizalde 2831.

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