Punta Querandí: la otra resistencia indígena

🗿 En Dique Luján, partido de Tigre, una comunidad indígena resiste desde hace más de una década la invasión de barrios privados en humedales, campos y parajes. La historia de Punta Querandí, territorio comunitario que conserva restos arqueológicos milenarios.

A apenas 50 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires, en Dique Luján (partido de Tigre), una comunidad indígena resiste desde hace más de una década la invasión de barrios privados en humedales, campos y parajes. Se trata de Punta Querandí, territorio comunitario y sagrado de una hectárea que conserva restos arqueológicos de pueblos originarios que datan de hace unos mil años. «Allí se respira lucha, es un ejemplo de que la tierra está en muy pocas manos y son muchas las tribus que necesitamos un lugar para vivir y seguir manteniendo la cultura», señaló a El Grito del Sur Cintia López, cacica de la Comunidad Qompi de Garín y vocera de la Unión de Pueblos Originarios de Tigre y Escobar.

Mientras transcurre otro 12 de octubre, Día del Respeto a la Diversidad Cultural, los poderes fácticos siguen dando muestras claras de no tener ningún tapujo a la hora de avanzar en el sometimiento y/o aniquilamiento de las comunidades indígenas. Punta Querandí está ubicado en una zona de enterratorios ancestrales que viene siendo destruida por la construcción de megaemprendimientos de barrios privados. Previamente, a causa del negocio inmobiliario, varios cementerios indígenas de la zona -Garín, Sarandí y otros tantos sin identificar- fueron arrasados generando un enorme daño a la preservación de las culturas originarias.

El campamento en defensa de Punta Querandí nació en febrero de 2010, cuando la empresa constructora EIDICO -de Jorge O´Reilly, ex asesor de Sergio Massa en Tigre- intentó extender sus posesiones al pequeño predio público con restos arqueológicos bajo la premisa de ampliar el country Santa Catalina, ubicado a sólo cien metros de distancia y construido ni más ni menos que sobre un cementerio indígena. Este avasallamiento logró ser frenado por un grupo de familias e individuos pertenecientes a los pueblos indígenas guaraní, qom, kolla y otras identidades que hicieron del territorio de Punta Querandí un espacio vital para desarrollar su cultura y su espiritualidad a través de diversas actividades y construcciones, utilizando los materiales que brinda la naturaleza.

Punta Querandí

«Punta Querandí significa un freno al descontrolado y conquistador ¨desarrollo inmobiliario¨ que viola derechos humanos, ambientales e indígenas. Es comenzar a recuperar la historia ancestral de esta Buenos Aires que es Territorio Indígena», plantean les integrantes de esta comunidad indígena. Además de retomar prácticas milenarias -tales como cestería con tortora, paredes de barro, alfarería con arcilla y otras-, su forma de organización es la asamblea comunitaria donde «se llega al consenso entre todas las familias y miembros de la comunidad».

Luego de ser ignorados durante mucho tiempo y amenazados con un juicio civil de desalojo que impulsó el empresario O´Reilly, en marzo de 2021 lograron que ocho restos humanos de miembros ancestrales del pueblo Querandí fueran restituidos a la comunidad Punta Querandí de Dique Luján. Este hecho fue una novedad: se trató del primer antecedente de restitución de restos a las comunidades originarias en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Asimismo, en mayo del año pasado el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) declaró como «sitio sagrado» al territorio Ancestral y Ceremonial Punta Querandí. Esta resolución oficial fue efectuada con el objetivo de proteger, visibilizar y honrar las diversas actividades ceremoniales, espirituales y culturales que realizan en estos sitios las comunidades de los pueblos originarios.

«Yo llegué a Punta Querandí en 2018 y poco a poco fuimos integrándonos, yendo a las celebraciones y actividades. La lucha de los hermanos y las hermanas es enorme, los emprendimientos inmobiliarios roban territorio y no respetan nada. Eso se ve en muchos lados. Nosotros necesitamos tierras para vivir unidos y no separados unos de otros», contó Cintia López.

El campamento en defensa de Punta Querandí nació en febrero de 2010, cuando la empresa constructora EIDICO -de Jorge O´Reilly, ex asesor de Sergio Massa en Tigre- intentó extender sus posesiones al pequeño predio público con restos arqueológicos bajo la premisa de ampliar el country Santa Catalina.

Como forma de generar un mayor intercambio cultural, desde hace varios años Punta Querandí recibe visitas de establecimientos educativos del Gran Buenos Aires con diversas realidades sociales y económicas. Esto permite acercar a los alumnos y las alumnas a la realidad social, histórica y cultural del espacio en que habitan, reconociendo que provenimos de diferentes culturas sin olvidar nuestras raíces originarias.

En Punta Querandí está el pasado y el presente: la defensa de la memoria originaria, la de los querandíes, la de los qom, junto a la defensa del medio ambiente y los humedales del Delta del Paraná. Esta superposición de problemáticas se topa con una gran disyuntiva: el ocultamiento o la visibilización. «Es un David contra Goliat. Punta Querandí es un ejemplo, un lugar de unión. Este 12 de octubre es un día de tristeza y de duelo, gracias a la resistencia de nuestros ancestros y ancestras hoy estamos acá: muchos recuperando nuestro idioma y manteniendo la cultura», concluyó López.

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Sebastián Furlong

Licenciado y profesor en Ciencias de la Comunicación (UBA). Retrato periodísticamente el conurbano y la ciudad de la furia. Agenda popular y política para analizar la realidad y aportar al quehacer colectivo.