Las internas del Frente de Todos, luego de haber sido protagonizadas durante meses por los líderes del espacio, derramaron esta semana en las bases. El anuncio de la postergada implementación de un bono “para indigentes” antes de fin de año por parte del Gobierno hizo saltar la térmica de discusiones que hasta entonces no habían sido expuestas de forma pública. La medida fue duramente criticada por el secretario de Economía Social y líder del Movimiento Evita, Emilio Pérsico, lo que le valió un cruce con la diputada nacional y referente del Frente Patria Grande y el MTE, Natalia Zaracho. La Cámpora, por su parte, incineró vía redes sociales a la dirección de la UTEP, que este jueves se reunió con los “gordos” de la CGT para presionar juntos para que se sostengan las PASO.
«Es difícil, con la mitad de la economía en negro, encontrar a los compañeros indigentes en una planilla de Excel. Es más fácil pensar subsidios y creer que así se termina la pobreza. Todos los progresistas quieren sacar un subsidio cuando llegan al Estado», disparó Pérsico en una entrevista radial.
«Emilio, soy cartonera y trabajadora de la economía popular desde los 13 años, de progre no tengo nada. Este refuerzo alimentario es muy necesario, lo expresa la realidad de nuestros barrios y llega a esas personas a las que hoy las orgas no llegamos», le contestó Zaracho en Twitter. «Dejemos los egos de lado», agregó.
El bono en cuestión asciende a 45 mil pesos y se pagará en dos tramos entre noviembre y diciembre. Se calcula que serán alcanzadas poco más de un millón de personas, que deberán solicitarlo de forma digital. Para percibirlo deberán acreditar no tener ingresos formales ni percibir ningún tipo de plan social o pensión estatal, ni tampoco AUH. Será financiado, en parte, con un fondo especial incluido en el DNU del “Dólar Soja” de septiembre.
El programa tiene más similitudes con el IFE pandémico que con el Salario Básico Universal impulsado por Juan Grabois y el Frente Patria Grande y que fue apoyado en su momento por Cristina Kirchner. De todos modos, guarda una fuerte relación con el proyecto de ley presentado este año por la senadora Juliana Di Tullio, que establece que la autoridad de aplicación sea la ANSES, que conduce Luana Volnovich, de La Cámpora, y no el Ministerio de Desarrollo Social, como sucede con la mayoría de los planes sociales.
Más allá del insulto elegido por Pérsico para la confrontación (“tabla de Excel”), la realidad es que el recorte del universo de beneficiarios será una tarea compleja, igual que lo fue el IFE. Más de cuatro millones de personas que lo habían solicitado durante 2020 se quedaron afuera, según los propios datos de ANSES. La mayoría de ellas por problemas con la documentación, como sucedió con la población migrante.
Pérsico, el Evita y el sector mayoritario de la UTEP, a través de su bloque de diputados nacionales, viene presionando durante el último año y medio por un paquete de leyes productivas para la Economía Popular, principalmente el Monotributo Social y la cuota de obra pública destinada a las cooperativas del sector, sin obtener demasiado eco en el resto del Frente de Todos. Parte de esa agenda se discutió hace 15 días con el propio ministro de Economía, Sergio Massa.
PASO y CGT
Las diferencias en ese punto entre Pérsico y el kirchnerismo son históricas. Cada vez que puede, el dirigente señala que Cristina Kirchner “no entiende ni escucha” al sector que representa. La última vez que la vicepresidenta se refirió al Evita en público fue de forma despectiva.
Algo de esa discusión se trasladó por estos días a la arena estrictamente electoral. Si Máximo Kirchner y el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, pretendieran avanzar a fondo con la anulación de las PASO (por ahora siguen con los trascendidos), tendrá en el mismo bloque del Evita un escollo nada despreciable que atravesar.
Este 17 de octubre, esa organización social y política realizó un acto masivo y por su cuenta en Laferrere, donde dejó en claro su intención de forzar una interna en territorio de Fernando Espinoza, uno de los hombres fuertes de Cristina en el distrito más importante de la tercera sección. Patricia Cubría, precandidata del espacio y esposa de Pérsico, fue la oradora principal. También Leonardo Grosso busca su propia interna en San Martín. El método le permitió a la única intendenta del Evita, Mariel Fernández, imponerse en Moreno en 2019, curiosamente con el apoyo de Máximo.
El sector de los gordos de la CGT, que también lanzó su propio espacio electoral el día de la Lealtad, recibió este jueves a la cúpula de la UTEP. La foto y el supuesto contenido de la charla, crítico del kirchnerismo y su forma de conducir, se filtró a los medios y fue aprovechada por La Cámpora para un posteo crítico que los vinculó con Mauricio Macri.
«No son tiempos para hablar de candidaturas», había dicho Máximo desde el escenario en Plaza de Mayo, durante el acto que protagonizó este lunes junto a Pablo Moyano y un amplio abanico de organizaciones sociales y sindicales del kirchnerismo.
“Compañerxs, hagámonos cargo de los problemas que sufre la Argentina y trabajemos para resolverlos. Además, ¿no era que Clarín miente?”, contestó el Evita. La calma post-atentado, parece, llegó a su fin.
