Masacre de Monte: arrancó la persecución de la verdad

👨‍⚖️ Este lunes comenzó en La Plata el juicio a los policías bonaerenses imputados por la muerte de cuatro adolescentes en 2019, en la localidad bonaerense de San Miguel del Monte. La sentencia se espera para el 17 de mayo. Qué dijeron familiares y testigos.

El pueblo de San Miguel del Monte se manifiesta el día del comienzo del juicio por la masacre de monte de 2019, en donde perdieron la vida tres chicos y una chica a causa de una persecusión policial. Andrés Wittib, El Grito del Sur, 8 de mayo de 2023

“La jornada fue agotadora y dolorosa pero salió todo bien. Tengo muchas expectativas y confianza”, dijo Susana Ríos, mamá de Gonzalo Domínguez, a El Grito del Sur después de su declaración. Además de padres y madres, brindaron testimonio en el Tribunal Oral de lo Criminal N° 4 de La Plata vecinos y el chofer del camión contra el que se estrelló el Fiat 147, auto en el que viajaban los adolescentes. La defensa de los policías intentó instalar la hipótesis de que Aníbal, conductor del auto, iba alcoholizado. Hoy, jueves, declaran peritos policiales.

El bloque acusador, las familias, considera tener las pruebas suficientes y exige condena perpetua para los policías. Del choque resultó sobreviviente Rocío Quagliarello, por entonces de 13 años, que brindó declaración en Cámara Gesell por ser menor de edad (17).

Los hechos

El 20 de mayo de 2019 cuatro adolescentes murieron luego de chocar contra el acoplado de un camión estacionado en la colectora de la ruta 3, en San Miguel del Monte. El choque se produjo porque el auto era perseguido y baleado por dos patrulleros de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Qué fue lo que inició la persecución y cuál es la culpabilidad de los acusados es lo que la jueza Carolina Crispani, junto con un jurado popular conformado por 12 personas, intentarán resolver a lo largo de estas audiencias. La acusación es por «homicidio agravado por abuso de función como miembro de las fuerzas policiales calificado por el empleo de armas de fuego, y violación de los deberes de funcionario público».

El día de la persecución, Gonzalo y Danilo asistieron a Aníbal en las inmediaciones de la Plaza Principal (rebautizada “plaza de lxs pibxs”) porque su auto se había parado. Una vez que lo arreglaron, Aníbal los invitó a dar una vuelta y en el camino se encontraron a Camila y Rocío, que también subieron al Fiat. En el auto se dirigieron hacia la zona de la laguna y al iniciar el regreso, una patrulla que iba por la zona comienza a perseguirlos, el motivo se desconoce. En una imagen de monitoreo de la municipalidad se ve cómo un policía saca su cuerpo por fuera de la ventanilla y comienza a disparar. Uno de los disparos alcanza a Gonzalo. Al poco tiempo, Aníbal pierde el control y el auto termina chocando contra un camión que estaba estacionado. Según la declaración del chofer, Héctor Monsi, la policía efectuó al menos cuatro disparos antes del choque y dos más después. “Se levantó mucha tierra alrededor del camión después del choque. Estaba dormido. Cuando corrí la cortina vi un cuerpo al lado, entre toda la tierra”, declaró.

El pueblo de San Miguel del Monte se manifiesta el día del comienzo del juicio por la masacre de Monte de 2019, en donde perdieron la vida tres chicos y una chica a causa de una persecución policial. Foto: Andrés Wittib, El Grito del Sur, 8 de mayo de 2023

En otro de los testimonios declaratorios, el día martes, el hermano de Aníbal, Emanuel Suárez, indicó que un mes antes la policía local los había intimado a él y a su hermano porque no tenían los papeles del auto y le habían pedido una coima de $35.000. «La Policía nos hizo seña de luces y nos llevaron a la comisaría. Ahí nos empezaron a apretar porque teníamos el domicilio en Misiones. Que teníamos que pagar una multa para salir. Como no teníamos domicilio en Monte, nos dijeron que iban a dejarnos detenidos», reveló.

Los imputados son el ex capitán de la Policía Bonaerense Rubén Alberto García y los oficiales Leandro Ecilape, Mariano Ibáñez y Manuel Monreal. Según se desprende de la investigación de la fiscalía, mientras que Ibáñez y Ecilape eran quienes conducían, Monreal y García quiénes efectuaban los disparos.

El pueblo que no quería ser gris

Luego de la madrugada del 20, rápidamente se quiso instalar la hipótesis del accidente. Susana Ríos acudió al hospital donde estaban los cuerpos y se encontró con la intendenta Sandra Mayol (hoy a cargo del INTI) y con funcionarios municipales que le negaron en la cara toda versión con disparos hacia el auto. Entre los imputados, hay diecinueve personas detenidas por encubrimiento y complicidad, personal policial y municipal aún sin fecha de juicio.

En la reconstrucción de los acontecimientos mucho tuvo que ver la voluntad y participación de la comunidad del pueblo. La noche de la persecución, la policía le quiso hacer firmar al chofer del camión estacionado que se trataban de “estruendos” en vez de disparos. El chofer se negó. Un vecino, el albañil Héctor Garcete, recogió los cuatro casquillos de las balas y los guardó para entregarlos a los familiares y a la fiscalía. Un empleado municipal aportó la prueba más contundente a riesgo de perder su trabajo, el video en donde se ve a un uniformado sacando su cuerpo para disparar. Varios vecinos mencionaron que escucharon disparos y un pizzero de la zona de la plaza confirmó que los chicos ayudaron a Aníbal en la puesta en marcha de su auto.

A partir de la masacre, se crearon en Monte el Movimiento 20 de mayo y la Asociación Civil Casa de los DD. HH. Madres del pueblo. El pasado lunes, cuando se inició el juicio, se convocó a una fogata para “mantener encendido el fuego de la memoria” y acompañar a los familiares de las víctimas. Durante estos cuatro años fue la comunidad la que sostuvo y resistió para llegar al juicio. Entre las distintas iniciativas, editaron y distribuyeron un “Manual de bolsillo para defenderse de la violencia policial”, pensado para los menores de 18 años del pueblo.

El pueblo de San Miguel del Monte se manifiesta el día del comienzo del juicio por la masacre de monte de 2019, en donde perdieron la vida tres chicos y una chica a causa de una persecución policial. Foto: Andrés Wittib, El Grito del Sur, 8 de mayo de 2023

“Hay un quiebre en el pueblo, un antes y después de la masacre. El pueblo se conmovió muchísimo y siempre acompañó mucho a las madres, entonces había que hacer un punto de reunión para que el pueblo diga presente, mandara fuerzas, que las madres sepan que estamos”, señaló en diálogo con este medio Maricarmen, presidenta de la Casa del Pueblo. “Gracias a la gente de Monte se descubrió esto, que se negaba. Se decía que era un accidente y la gente tonta no es”.

Trinidad Loyola, vecina y amiga de los familiares, indicó que “hay una tendencia al silencio, a la no denuncia, porque nos conocemos todos, nos cruzamos todos los días. Pero después de lo que pasó hubo una ola de denuncias por violencia institucional. Es una práctica sistemática y nuestro pueblo no está exento de eso”.

El recuerdo de las víctimas

Candela, amiga de Gonzalo, lleva tatuado en su brazo un skate con su nombre, dice: “con Gonzalo somos amigos desde chiquitos, a la salida de la escuela tomábamos algo o jodíamos acá en la plaza. Yo soy más grande que él, pero teníamos una amistad muy linda”. Candela espera poder estar presente en La Plata, para acompañar a Susana, mamá de su amigo. “Me acuerdo de su sonrisa, jugábamos todo el tiempo. Trato de acordarme de él siempre. Acompañamos a la familia de la mejor manera posible. Queremos perpetua para los cuatro y que nos expliquen por qué”.

El pueblo de San Miguel del Monte se manifiesta el día del comienzo del juicio por la masacre de monte de 2019, en donde perdieron la vida tres chicos y una chica a causa de una persecución policial. Foto: Andrés Wittib, El Grito del Sur, 8 de mayo de 2023

Para Mónica, abuela de Camila López, “la expectativa es que se haga justicia, que paguen lo que tienen que pagar. Camila era muy divertida, siempre le gustaba dar una vuelta en la laguna y venir a escuchar a los chicos en la plaza. Jugar a rapear. Como toda chica de 13 años. Esperamos que cada uno reciba su condena”.

Mabel, tía de Danilo, se mostró “orgullosa de lo que están haciendo en el pueblo. Pedimos justicia por mi sobrino, para que mi sobrina se quede tranquila. Danilo era hermoso. Él siempre estudió, tenía muy buenas notas, yo era maestra particular de él, pero él me enseñaba a mi, era un bombón para la tía. No se merecía lo que le hicieron, ninguno de los cuatro. Pedimos justicia y perpetua”. 

Paola, otra de las tías de Danilo, dijo a El Grito del Sur: “estoy acá para seguir pidiendo justicia, no voy a bajar los brazos, al igual que las mamás, las tías y los abuelos. Tienen que pagar. La gente de Monte es muy unida, siempre estuvieron a la par de la familia, y también vino mucha gente de otros lados. Hoy tenemos que estar un poco más reunidos para apoyar a las familias, a Gladys. Danilo era un chico alegre. Yo siempre le decía mi parkurero, era un pibe bueno, de pueblo. Iba con su patinenta, su risa…, ‘tía vamos acá, tía vamos allá, dame platita para el pebete’ me decía, era un pibe sano”.

Amigos, compañeros y otros familiares planean realizar un viaje a la ciudad platense para el día de la sentencia. Y realizarán una nueva jornada de memoria el sábado 20, día del cuarto aniversario de la masacre.

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