Dentro del Presupuesto 2025, los organismos de ciencia y tecnología han sido nuevamente afectados por la profundización del ajuste que promueve el presidente Javier Milei. De acuerdo con el proyecto presentado por el gobierno nacional, el CONICET sufrirá -a valores constantes- una reducción de sus partidas en un 41% y la inversión en el INTI tendrá una caída del 46,6%. La misma suerte correrán la Agencia I+D+i (-67%), el INTA (-39,6%), la CONAE (-40%) y el Banco Nacional de Datos Genéticos (-50,4%). En términos generales, se trata de una abrupta caída en la inversión del 33,25% para el año que viene que pondrá en riesgo el desarrollo de la ciencia en nuestro país.
Especialistas señalaron que la reducción del presupuesto en educación, ciencia y tecnología en 2025 será incluso mayor que lo ocurrido este año. «El art.27 propone la suspensión de las leyes de financiamiento que fueron votadas por unanimidad por todas las fuerzas políticas en el Congreso», agregó Daniel Filmus -ex ministro de Ciencia y Tecnología y ex ministro de Educación- a través de la red social X. Cabe destacar que el presupuesto enviado por Milei apunta a lograr «déficit cero», en línea con los objetivos del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado -a cargo de Federico Sturzenegger- para avanzar en la privatización o liquidación de empresas estatales.
Luego de despidos y retiros voluntarios, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) perdió unos 500 trabajadores y trabajadoras desde diciembre hasta la actualidad. Entre ellos se encontraban profesionales altamente calificados que asistían a las diferentes ramas de la industria: alimentos, plástico, química, etc. El desguace del organismo, según denuncian sus laburantes, tiene como meta reprimarizar la economía del país. «Es muy preocupante que se achique el presupuesto de un organismo tan importante para la industria nacional. Esto por supuesto va a repercutir en un mayor recorte de personal, porque una importante suma del presupuesto va dirigida al sueldo de las y los trabajadores. Este achicamiento del Estado se va a traducir en más despidos, cierre de líneas de trabajo y fuga de cerebros», planteó a El Grito del Sur Francisco Dollmann, secretario general de ATE INTI.
Por su parte, el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) viene sufriendo también un creciente desmantelamiento con más de 600 despidos, recortes en becas y parálisis de los subsidios a la actividad científica. El pasado 31 de julio, se interrumpieron en forma «irregular» más de 200 becas posdoctorales y se redujo a «mínimos históricos» el ingreso de nuevos becarios doctorales y posdoctorales. En diálogo con este medio, Victoria García -secretaria general de ATE CONICET- explicó que «el proyecto de presupuesto presentado por Javier Milei viene a consolidar la política de desfinanciamiento y vaciamiento del CONICET y del sistema científico que el Gobierno ha desplegado desde su asunción en diciembre». «Concretamente, la normativa suspende por un año el financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología, que según la ley 27.614 debería llegar al 1% del PBI en 2031. Esta propuesta de presupuesto no hace sino prolongar y profundizar una política que ya se está llevando adelante en ciencia y tecnología y en todo el Estado», sumó García.
Otra de las preocupaciones del sector estatal en su conjunto es que el próximo 30 de septiembre vencerán nuevamente miles de contratos en la Administración Pública Nacional. Desde el gobierno nacional apuntan principalmente a barrer con las y los trabajadores bajo contrato temporal, un universo que -según voceros oficialistas- rondaba las 70 mil personas al inicio del mandato libertario.