Cinco ensayos feministas para leer después de la marcha

💚 ¿Fuiste a la marcha y te quedaste manija de conocer más sobre el feminismo? A continuación te dejamos cinco textos fundamentales para nutrir tu biblioteca y seguir creando conciencia crítica.
05/02/2025

Si sos joven y vivís fuera de un raviol, en algún momento de los últimos cinco años te atravesó en mayor o menor medida el feminismo. En el aula, la calle o la juntada con tus amigues, alguien se puso el pañuelo verde o habló con la E. La revolución de las hijas, la marea verde y la paridad de género aparecieron en la agenda pública para quedarse. 

Desde el primer Ni Una Menos hasta la marcha antifascista del sábado 1 de febrero, mujeres y disidencias se hicieron notar en las calles. Hablaron referentes y periodistas sobre la necesidad de mayor igualdad de género y los partidos políticos entraron en crisis de representación. 

Te guste o no, el feminismo se popularizó en el último lustro entre la juventud que se identificó con éste o se paró en la vereda de enfrente. Nadie quedó indemne ante estas ideas. Fue el movimiento más rupturista en la sociedad argentina desde el 2001. Sin embargo, no se trata de un fenómeno reciente y no surgió hace algunos meses por parte de un grupo improvisado. El feminismo viene de larga data y ha provocado cambios sustanciales en la conciencia de miles de personas durante siglos. De hecho, Sor Juana Inés de la Cruz ya escribía ideas revolucionarias en cuanto al género desde la época de la colonia.

Si te interesa investigar más al respecto, si fuiste a la marcha pero te falta marco teórico, si te suenan las consignas pero te gustaría ahondar más en la temática, te traemos cinco ensayos feministas que deberías leer para estar más formado. Éste es apenas un pequeño recorte, pero hay muchas más autoras y autores para incursionar y ninguno tiene más valor que otro. La idea es abrir muchas puertas y no cerrar ventanas. Escuchar diferentes voces para poder crear una conciencia crítica y adaptar los lemas a nuestra vida cotidiana.

Si tenés recomendaciones, podés dejarnos tu ensayo feminista preferido en los comentarios o en nuestras redes sociales. A continuación, cinco volúmenes sobre los que tenés que indagar un poco más si te interesa la perspectiva de género. Spoiler alerta: estas ideas te pueden romper un poco la cabeza. Nosotros te lo avisamos.

Simone de Beauvoir: “El segundo sexo”

Entre 1908 y 1986 existió en Francia una gran representación del feminismo del siglo XX. Se trata de Simone de Beauvoir, filósofa, escritora, ensayista y pensadora del feminismo que marcó un antes y un después en la lectura del movimiento. Simone fue autora de novelas, ensayos, biografías y monografías sobre temas políticos, sociales y filosóficos. Su pensamiento se entronca con la filosofía del existencialismo y estuvo influenciada por Jean Paul Sartre, quien fuera su pareja. Simone se declaró atea, considerando que la religión era una manera de subyugar al ser humano. Su libro más elogiado y el que recomendamos aquí leer para incursionar en las ideas feministas es el volumen titulado “El segundo sexo”. 

“El segundo sexo” fue escrito en 1949 y resultó un gran éxito de ventas. En el mismo, De Beauvoir reflexiona acerca de los perjuicios de ser mujer y las dificultades a las que se enfrentan diariamente quienes son leídas de esa manera. Esta obra aborda la identidad de las mujeres y la diferencia sexual desde los puntos de vista de la sociología, la psicología, la historia, la antropología, la biología, la reproducción y la relación afectivo-sexual.

La teoría de Simone se basa en que lo que entendemos estereotípicamente como mujer -abocada al cuidado de la casa, a la familia y a los mandatos de belleza- es un producto cultural que se ha construido socialmente. De hecho, la autora afirma que la mujer siempre se ha definido respecto a algo masculino: como madre, esposa, hija o hermana. En ese marco, la principal tarea de la mujer es reconquistar su propia identidad específica y desde sus propios criterios. En este escrito, Simone acuña la célebre frase «No se nace mujer: llega una a serlo», que resuena hasta hoy en los oídos de las feministas. Es un texto bastante frecuente entre la bibliografía feminista, así que podés encontrarlo en tu biblioteca más cercana.

Silvia Federici: “El calibán y la bruja”

Silvia Federici es una filósofa, historiadora, escritora, profesora y activista feminista ítalo-estadounidense. Con 82 años, esta pensadora suele frecuentar nuestro país trayendo sus ideas y dando hermosas conferencias en asambleas y sindicatos. Su obra más reconocida y la que recomendamos leer es “El calibán y la bruja”, donde hace un viaje pormenorizado al medioevo bajo las lentes de la perspectiva feminista. Editado en 2004, “El calibán y la bruja” es una respuesta feminista a “El capital” de Karl Marx. Federici incursiona en cómo la creación de la figura de la bruja en la inquisición europea permitió que se masacraran mujeres y se las disciplinara para que obedecieran el régimen capitalista. Como en sus otros trabajos, Federici concluye que el trabajo reproductivo y de cuidados que hacen las mujeres, sin obtener una remuneración económica a cambio, es la base sobre la que se sostiene el capitalismo. Así se justifica el uso de la extrema violencia, ejercida contra los cuerpos de las mujeres como un método sistemático de subordinación, que es la base del Estado moderno. Además, la filósofa acuña la frase “eso que llaman amor es trabajo no pago”, que se puede leer en stencils, remeras y carteles femininjas y en la lucha por el salario básico universal. En el último capítulo del libro, Federici se encarga de nuestro continente cuando investiga las continuidades entre la caza de brujas europea y el dominio de las colonias para mostrar el carácter global del desarrollo capitalista.

Judith Butler: “El género en disputa”

Publicado en 1990 en Estados Unidos, «El género en disputa” es un libro célebre de Judith Butler y un aporte esencial a los estudios de género. El mismo marca un antes y un después en la teoría feminista. Este volumen se considera como uno de los textos fundacionales de la teoría queer y del feminismo postestructuralista. La idea principal del libro se basa en que el sexo es a la naturaleza lo que el género es a la cultura. Es decir que ninguno de ellos es natural, sino que ambos son construidos. Según Butler, el sistema nos lee como hombres o como mujeres desde antes de nacer, cuando nos asignan un género y en ese sentido se nos atribuye ciertas características intrínsecas a partir de nuestra genitalidad. El volumen plantea que tanto el sexo como el género son constructos socioculturales dados en el discurso y en los actos performativos. En criollo: no es lo mismo lo que se espera de vos al nacer nena a que seas varón. Butler se cuestiona la figura de la mujer como sujeto del feminismo y plantea el hecho de que tanto el género como el sexo son construcciones que se dan en un espacio, tiempo y entorno social concretos. Para su teoría utiliza el psicoanálisis y discute con Julia Kristeva, Jacques Lacan, Michel Foucault y Monique Wittig, entre otros. Butler propone que no es necesario partir de conceptos binarios, ya que éstos son también constructos discursivos. La pensadora rompe con todo lo establecido cuando plantea que todo lo que rodea al género y al sexo se hace en un espacio, tiempo y colectividad determinados, con lo cual la biología no tiene mayor incidencia.

Virginie Despentes: “Teoría King Kong”

Si bien no es un ensayo teórico o filosófico en sí, el libro «Teoría King Kong» resulta fundamental para entender algunos rasgos del feminismo contemporáneo. De escritura sencilla y descarnada, la cineasta francesa Virginie Despentes relata sus vivencias más cercanas de violación y prostitución. La teoría elaborada por la francesa consiste en que la violación es una situación con la que cada mujer o feminidad convive constantemente y que eso alinea nuestros comportamientos. En su escrito describe la violación como «guerra civil, una organización política a través de la cual un género declara al otro: tengo completo poder sobre ti». Asimismo, Despentes describe cómo la sociedad degrada y silencia a las mujeres que son víctimas de agresiones sexuales. Ella señala que «después de la violación, la respuesta aceptable es volver la violencia hacia adentro, hacia ti mismo». A su vez, habla de la incidencia de la pornografía y refiere que sólo valora el deseo femenino tal como ocurre a través de la mirada masculina. Desde un amplio rechazo al matrimonio y a toda la ideología romántica, Despentes señala que las mujeres que no aman a los hombres son vistas como seres patológicos, mientras que los hombres que no aman a las mujeres son vistos como “ganadores”. En 2019 Random House publicó Follame, otra gran novela feminista de la autora. 

Rebecca Solnit: “Los hombres me explican cosas”


«Los hombres me explican cosas”, de Rebecca Solnit, empieza con una anécdota cotidiana de la autora. Ella está en una cena y un hombre le comienza a explicar un libro que, aunque su interlocutor no lo sepa, termina siendo el que la misma autora escribió. Él asegura que conoce el texto mejor que ella y es gracioso cómo termina realizando el punto cúlmine del mansplaining. A partir de ese encuentro, Solnit se mete en la crítica feminista para realizar un exhaustivo recorrido por las distintas formas de violencia que ejercen los hombres sobre las mujeres. Los nueve ensayos que componen el volumen fueron escritos originalmente entre 2008 y 2014; sin embargo, no pierden la vigencia al día de hoy. En sus escritos, Solnit habla de la necesidad de los hombres de explicar lo que no conocen aunque, por el contrario, las mujeres sean «expertas» en el tema, algo que, para la soberbia del primero, es irrelevante. Con una escritura ágil y envolvente, Solnit cuestiona muchas de las situaciones cotidianas haciendo hincapié en cómo las mujeres son tratadas con condescendencia, minusvaloradas e ignoradas. Además, indaga en el miedo y el silenciamiento que termina socavando su autoestima y posicionándolas como inferiores en el ámbito laboral. Vale la pena leerlo para entender muchas de las desigualdades y el síndrome del impostor que permite que se perpetúen al día de hoy las estructuras del patriarcado.

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