Es sábado por la tarde y el sol de invierno deja ver que ya se acerca la nueva estación, la más linda del calendario. Cuando entramos a la sala de teatro Caras y Caretas un ambiente envolvente con luces, música y gente bailando nos recibe en el escenario. “Mati y Pablito” es una obra que empieza como una fiesta. Las butacas, -abajo y encima del estrado- se van llenando de espectadores ansiosos. La obra empieza sin que nos demos cuenta, con un encuentro ocasional, un protagonista que sale del público, una complicidad entre los ocasionales bailarina y los actores. Mati pregunta si puede pasar al VIP de la fiesta, ahí se encuentra con Pablito, su amigo de la infancia que no ve hace años.
Mati y Pablito se conocen desde chicos pero se encuentran una noche de su temprana adultez. A partir de allí comparten recuerdos en común y se sumergen en los momentos compartidos, que traen a la escena frente al público. Luego de vivir su infancia atados por el miedo al rechazo ajeno ahora que se encuentran son realmente libres.
A partir de este disparador la obra de sesenta minutos interactúa con los espectadores, los interroga y los hace partícipes de la trama. Con herramientas del teatro físico, la performance y la comedia la obra va mutando de clima a lo largo de su desarrollo, sin dejar de interpelar al otre. Hablan desde la sensualidad y la ternura, dos territorios que no siempre se complementan ni se encuentran, como islas que se funden entre sí. A partir de allí Mati y Pablito retratan su vínculo.
La amistad de los protagonistas es el centro del relato. Este trabaja sobre la zona liminal entre la amistad y el amor romántico. ¿Podemos enamorarnos de nuestros amigos? ¿Hasta donde el histeriqueo está permitido y donde es doloroso? ¿Hay una parte que siempre pierde en esta ecuación? Mati y Pablito exploran las porosas fronteras del deseo pero también las posibilidades infantiles de conocerse a sí mismos. ¿Qué cosas dejó de hacer nuestro yo del pasado por miedo?
Con la puesta en escena surgen algunas dudas ¿Qué se nos permite desear en la infancia? ¿Los gestos pueden más que las palabras? Las manos que se rozaron entre sí y ambos las recuerdan ¿Cómo se filtra la ternura pero también el deseo y el sexo en los territorios de la pubertad?
Mati y Pablito es la primera obra de las tres que presentará el ciclo Les Actuantes durante lo que queda de este año en la sala de Sarmiento al 2037. Es una de las obras performáticas de la compañía ESTERTOR.
La obra narra una historia de amor, que son muchas, como un intento constante para indagar cómo percibimos el amor en nuestra era. La dificultad de no encajar en la masculinidad hegemónica se solapa con el cariño tierno de dos niños que se quieren siempre bordeando la frontera del deseo. La friendzone puede ser un estado de la cuestión. ¿Quienes entran y salen de estos parajes? ¿Es un lugar incómodo o una espera deseante de que alguien por fin dé el sí?
Esta pieza aborda la historia de dos personajes que fueron amigos de toda la vida, sin embargo un encuentro en su temprana adultez los lleva al límite de lo que conocían de ellos mismos, de su vínculo.
Interactuando con el público presente Mati y Pablito entran y salen de escena en un juego metatextual entre la vida y la obra del intérprete. De esta manera hacen de cada función un evento único que se desarrolla entre las luces de neón con una DJ en escena que musicaliza todo el espectáculo.
Les Actuantes es un colectivo independiente de actores y actrices que desarrolla proyectos
y espacios culturales desde la idea hasta la materialización para acompañar la formación y
profesionalización de la generación nacida entre los 90s y los 2000s. Desde el año 2021
trabajan de forma independiente y colaborativa generando espacios de encuentro, diálogo, investigación y circulación que profundicen el cruce e intercambio en el campo de la actuación.
Después de cada función del ciclo, Les Actuantes arma en la terraza del teatro un
encuentro con músicxs en vivo que cambian cada sábado mientras cae el sol.
Con actuación de Matías Marta, Pablo Racciatti y creación de estos dos y Andi Bernay, Micaela Irina Zaninovich, Mati y Pablito es una declaración de amor a viva voz, a los gritos
El espectáculo toma la frescura de la poesía contemporánea con los versos de Mariano Blatt cómo inspiración. Una sublimación de los pequeños gestos cotidianos y los pequeños momentos. “A nuestras familias y a nuestros amigxs qué también son nuestros amores”, agradecen Leas Actuantes.
Mati y Pablito son dos pibitos que se conocieron en el barro y en las placitas del barrio. Que compartieron porro, éxtasis, alcohol y que jugaron entre golpes y tracción pero que se acompañaron cuando todo parecía pudrirse. Ahora se encuentran en una fiesta luego de varios años sin verse y, por primera vez, son libres.
La obra aún tiene tres funciones más en el subsuelo de la UMET y las entradas pueden conseguirse en Alternativa Teatral. Este proyecto fue realizado en coproducción con Fundación Cazadores, Yegua producciones y MDE escénicas.
