En las últimas semanas el caso de Nahir Galarza, la joven acusada por la muerte de su ex pareja, Fernando Pastorizzo, revolucionó los distintos medios de comunicación del país. A pesar de que su abogado recalcó que «está siendo deteriorada anímicamente» y enfatizó que «es una mortificación» que siga en prisión, el día de ayer fue denegada por tercera vez su excarcelación. La cuestión es ¿cómo los mass-media proporcionan la información? ¿qué lenguaje e imágenes utilizan para generar un consenso? ¿Por qué los medios apuntan a Nahir como única culpable en un caso donde los factores externos -sociales y familiares- son fundamentales?
Desde que se conoció el hecho los medios masivos han construido un reality show del mismo publicando día tras día los últimos movimientos de la causa. El lenguaje que ha sido utilizado, como así también las imágenes, son elementos fundamentales al momento de analizar cómo se divulgan y dan a conocer las noticias.
Mediante la utilización de diferentes fotos que Galarza había publicado en sus redes sociales, -disfrazada de ángel en una fiesta, tomando sol en la playa, o con su ex pareja- se construyó una imagen que obliga a tomar partido entre la víctima o la homicida.
Incluso se le creó un perfil en Wikipedia que incluía un repasando los detalles del caso. Durante los días en que la página estuvo activa fue visitada por más de 5.900 personas. Finalmente fue dado de baja por tratarse de algo «irrelevante enciclopédicamente”. No menor que durante la semana en la cual se pudo visitar, el perfil haya estado ubicado en la categoría «Asesinas de Argentina».
Algo similar sucedió con la utilización de las imágenes, los medios también se centraron en hacer una crónica de cómo Nahir pasaba sus días de detención, realizando un show. Se dijo que la joven se encontraba en una celda VIP, sin computadora, televisor y celular, que había pedido un personal trainer, y un masajista.
En los medios de comunicación cuando un caso judicial se centra en una mujer el lenguaje cambia, generalmente avala la estigmatización y reproduce estereotipos. A pesar de los testimonios de los vecinos acerca de la violencia que ejercía su pareja sobre la joven, de haber encontrado lesiones en las pericias ginecológicas y el hecho de que en su casa Nahir tuviera acceso al arma reglamentaria de su padre no parece ser suficiente para problematizar el veredicto de la corte.
La fiscal del caso, Martina Cedrés, informó a Telam que la semana que viene se realizarían pericias psiquiátricas sobre la joven y que «Si logramos elevar la causa a juicio en febrero, en los últimos días de marzo se estaría llevando a cabo el juicio oral y público». Para ese momento los peritos esperan poder registrar la computadora y el celular de Pastorizzo.
Más allá que cada medio tiene una ideología y una manera de divulgar las noticias, en la mayoría se puede visibilizar la cultura patriarcal que posee nuestro país, ya no importa si la mujer es la víctima o la victimaria siempre se la va a responsabilizar y estigmatizar.
