Memoria, anticolonialismo y rebelión desde lo liminal: vuelve Cine Migrante

La edición número catorce del festival Cine Migrante llega a la Ciudad de Buenos Aires con el estreno de veinte películas nunca antes proyectadas en Argentina, a lo largo de siete programas que responden a siete disparadores.

Cine Migrante es considerado uno de los más importantes encuentros cinematográficos de la agenda cultural regional. Desde aquella primera edición en 2010, mantiene como objetivo construir un diálogo intercultural e integrador, de formación en Derechos Humanos, para con ello poder hablar de las realidades sociales de las comunidades migrantes.

En este nuevo encuentro se compone de actividades como conferencias, lecturas, performance y proyecciones que forman un todo complejo e interconectado. Una conexión entre las diferentes expresiones, unidas por un hilo conductor potente, decolonial y disruptivo.

Distribuida en tres salas (Centro Cultural Kirchner, Cultural San Martín y Cine Gaumont), la decimocuarta edición de Cine Migrante parte de una declaratoria que la ubica en un punto geográfico, político y estético: «En el límite de lo visible». La apertura del programa es clara: «en esta 14° Edición el tono vegetación azul noche inunda todo nuestro festival. CineMigrante trae una propuesta que se abre hacia un cine que elude el encuadre y huye de la captura, en un gesto de fuga por conformar terreno, pequeñas parcelas habitables». Ese margen configura la identidad del festival y la propuesta que ofrecerá al público que lo visite, desde el 20 y hasta el 30 de septiembre.

Todos los films que participan de esta edición estarán enmarcados en dos curadurías: «Indicios de Parcelas Habitables» y «Materiales Fantasmas». La primera es la curaduría central del festival, realizada por Almudena Escobar López (España), Olivier Marboeuf (Francia) y Florencia Mazzadi (Argentina). Se compone de siete programas que «dan espacio a una cinematografía que confabula algunas estrategias de fuga de voces y vidas minoritarias, de las capturas de la modernidad occidental». En este camino, se enfoca en los sujetos vivientes, en sus corporalidades como símbolos cargados de nuevas epistemologías, insertos en un contexto nocturno.

Esta primera curaduría es un recorrido áspero por dieciocho filmes que caminan sobre el suelo X. El programa n°2, «Discernir el destello de la posibilidad», parte del filme «Cette Maison» (Myriam Charles, 2022) para construir un «qué hubiera pasado si» que conecta pasado, presente y futuro desde la ausencia. El programa n°3, «La barca está abierta», indaga – a partir de cuatro propuestas audiovisuales- en musicalidades, espiritualidades y ausencias en territorialidades de apariencia inconexa. El cuarto programa, «Un lugar que deshabla», muestra la conexión irrompible entre el territorio y los sujetos que lo habitan -humanos y no humanos- envueltos en discursivas de rebelión y conciencia ambiental. El quinto, «¿Dónde están sus monumentos?», reconstruye caminos de rebelión, de identidad, de movimiento territorial y corporal. En el programa n° 6, «¿Dónde están sus archivos?», tres producciones se centran en la construcción de archivos de la memoria viva, desde la polivocalidad de los sujetos, a través del espacio y de las generaciones. En el programa n°7, «Sobre qué suelo caminas», dos filmes que pisan suelo brasilero, para hablar de territorios, colonialismo y ambientalismo: «Ha Terra!» (2016) y «E noite da América» (2022), ambos de la artista Ana Vaz. 

El cierre es el principio y el festival culmina con el programa n°1, en dos salas simultáneas y con «lo colectivo» como base. Dos filmes que muestran una grupalidad desde el feminismo y otra grupalidad desde la distopía de construir una nueva sociedad separada de nuestras estructuras de poder actuales.

«Materiales Fantasmas», la segunda curaduría a cargo de Olivier Marboeuf, se centra en una puesta en valor del archivo fílmico y visual de Guinea Bissau, un proceso que ya lleva más de diez años de trabajo. Las cintas se tornan testimonio del nacimiento del cine guineano y una parte esencial de la visión de la descolonización de Amílcar Cabral, ingeniero agrónomo, escritor y uno de los líderes de la liberación, asesinado por las fuerzas represivas del poder colonial en 1973. Esta curaduría se compone de tres programas que viajan desde las aldeas africanas hasta las capitales occidentales.

«Nome» (2023), del director y escritor bissau-guineano Sana Na N’Hada, es una historia centrada en Nome, quien deja su aldea para sumarse a la resistencia del Partido Africano por la Independencia de Guinea (PAIGCV) contra el gobierno colonial portugués. Se proyecta el jueves 28 de septiembre, a las 18:30hs, en el C.C. Kirchner (Piso 6, Sala B).

La realizadora portuguesa Filipa César vuelve a la figura de Amilcar Cabral en «Mined Soil» (2014), pero enfocada en su trabajo agrónomo, en el suelo como espacio que también proyecta memorias. Convive su propuesta con «Spell Reel» (2017), de la misma portuguesa Filipa César, donde la memoria documental del inicio del cine guineano opera como espejo no solo del pasado, sino también del presente, desde una mirada decolonial. Se puede ver el viernes 22 de septiembre, a las 20hs en la Sala Leonardo Favio del Cine Gaumont.

Cine Migrante rodea el territorio y lo habita, pero desde perspectivas que huyen/combaten el encuadre colonialista. Una propuesta para nuevas construcciones de sentido, de memoria, de escucha y habla. Todo en un tono vegetación azul noche dispuesto a cubrirlo todo.

Conocé el programa completo, acá.

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Demian Urdin

Antropólogo social, coleccionista y crítico de la Historieta Argentina. Ganador de la Beca de Investigación Boris Spivacow II de la Biblioteca Nacional Mariano Moreno en 2018. Colaborador en Revista Blast de Colombia.