La decisión del gobierno nacional de no prorrogar las concesiones ferroviarias de carga en las líneas Sarmiento, Mitre y Roca marca un nuevo hito en la recuperación estatal de la administración del sistema nacional de trenes de cargas. Trenes Argentinos Cargas, la empresa pública que opera servicios de transporte ferroviario de cargas, asumirá temporalmente la operación de esos servicios a medida que las concesiones vigentes vayan expirando en los próximos años.
El Ministerio de Transporte, mediante una resolución firmada el lunes pasado por el ministro Alexis Guerrera, oficializó la decisión de rechazar los pedidos de prórroga de estas concesiones. Las empresas Ferroexpreso Pampeano, Nuevo Central Argentino y Ferrosur Roca vienen operando los servicios de cargas en las líneas Sarmiento, Mitre y Roca, respectivamente.
Las concesiones fueron otorgadas en la década de 1990 por 30 años y con una opción para renovar por 10 más. El Ministerio de Transporte consideró la evaluación llevada a cabo por la Comisión Especial de Renegociación de Contratos a la hora de rechazar las prórrogas. “Las concesiones ferroviarias de cargas arrojan, al cabo de casi 30 años, un balance negativo en términos de estado de la infraestructura, velocidad y ramales perdidos”, concluyó la comisión del Ministerio.
“Lo que está haciendo el Estado es recuperar la facultad del manejo de su patrimonio histórico y poder mejorarlo y operarlo”, remarcó Guerrera en declaraciones a la agencia Télam. También explicó que la decisión tomada no implica estatizaciones ni reestatizaciones sino el final de esas concesiones. La primera en expirar es la de Ferroexpreso Pampeano en octubre de este año. Las concesiones de Nuevo Central Argentino y de Ferrosur Roca vencen en diciembre de 2022 y marzo de 2023, respectivamente.
La resolución de Transporte abrirá un período de transición, como parte del proceso de implementación de un modelo de uso abierto con participación estatal y privada, siguiendo los lineamientos de la ley ferroviaria 27.132 sancionada en 2015.
En ese esquema de transición y a partir de 2022, Trenes Argentinos Cargas pasará a estar a cargo de las operaciones. Por otro lado, Trenes Argentinos Infraestructuras tendrá la administración de la infraestructura ferroviaria y de la totalidad de los bienes. También deberá proponer para aprobación del Ministerio de Transporte el canon a abonar, durante la etapa de transición, por los operadores ferroviarios. Según la resolución de Transporte, los plazos necesarios para implementar el esquema de transición no son menores a 10 meses.
“La ley de 2015 lo que hace es salir del concepto de las concesiones del 90 e ir a un concepto de participación pública y también la posibilidad de la participación privada. Esta resolución que lleva adelante el Ministro de Transporte lo que hace esencialmente es adecuar el sistema a la ley 27.132”, explicó el vicepresidente de Trenes Argentinos Cargas (TAC), Martín Gainza, en diálogo con El Grito del Sur.
La ley ferroviaria de 2015 modificó el sistema de transporte ferroviario, dejando atrás el modelo de las concesiones integrales. “Ya no se podrán hacer concesiones en forma integral, esto es, dar en concesión la infraestructura más el material rodante, sino que se modificó el sistema para que tenga una categoría abierta y mixta”, dijo Gainza.
Las concesiones integrales implicaban que las empresas concesionarias tenían el control de las vías y del material rodante, aplicando sus propios criterios comerciales. La ley 27.132 pone fin a esa lógica al instruir al Estado a reasumir la plena administración de la infraestructura ferroviaria en todo el territorio nacional y establecer la modalidad de acceso abierto a la red ferroviaria nacional para la operación de los servicios de transporte de cargas y de pasajeros.
“Es abierta porque las empresas o aquellos que comercialicen y que circulen por las vías lo van a hacer a través de un sistema de tarifas, canon o peajes, que es el que se va utilizar para obtener los recursos para el mantenimiento de la infraestructura ferroviaria, más las inversiones estatales”, planteó el vicepresidente de TAC.
Los servicios ferroviarios de cargas son fundamentales para que las provincias, las economías regionales, y los pequeños y medianos productores puedan transportar sus mercaderías, tanto para abastecer al mercado interno como para exportar. TAC opera actualmente los servicios de carga en las líneas Belgrano, San Martín y Urquiza. En términos globales suman unos 9100 kilómetros de vías operativas, cubriendo 17 provincias y llegando a cinco pasos internacionales. Argentina tiene una red ferroviaria de unos 18.000 km de extensión; menos de la mitad de los 48.000 km que se llegó a tener.
Una razón central para rechazar las prórrogas de las concesiones fue la falta de inversiones por parte de los concesionarios. Como contraste, Gainza destacó las inversiones y mejoras que se vienen realizando en las líneas en las que opera Trenes Argentinos Cargas y que se ven reflejadas en el crecimiento del tonelaje transportado. “En los últimos dos años, si uno analiza la evolución del tonelaje transportado por Trenes Argentinos Cargas en sus tres líneas, se ve que ha crecido prácticamente un 25% en 2020 con respecto a 2019”, señaló.
“Hay un crecimiento paulatino en todo lo que tiene que ver con el tonelaje de mercaderías transportadas. Esto tiene que ver con que hay una mejor infraestructura ferroviaria, las empresas del interior del país y las economías regionales apuestan al ferrocarril como sistema de transporte en distancias medianas o mayores. A los 400 km el transporte ferroviario es un 30% más barato en términos logísticos”, agregó Gainza.
La línea Urquiza es un foco de especial atención para el Gobierno. “Es cierto que la línea que más necesitamos recuperar y que tiene un gran potencial es la línea Urquiza. En los cuatro años del gobierno anterior fue muy dejada de lado y estuvo al borde de ser clausurada. Lo que estamos haciendo es recuperar e invertir mucho en todas las líneas y especialmente en la Urquiza. Tiene un gran potencial, atraviesa provincias muy productivas y con mucha necesidad de que el sistema de trenes exista”, dijo.
El gobierno nacional retomó la senda de los acuerdos ferroviarios firmados con China durante la segunda presidencia de Cristina Fernández de Kirchner. Una nueva etapa de ese acuerdo se abrió en diciembre pasado con la firma de convenios con empresas chinas para inversiones en obras ferroviarias para trenes de carga por 4204 millones de dólares, que generarán 28.452 puestos de trabajo en 13 provincias. También se firmó un acuerdo de inversiones en trenes de pasajeros.
“Desde lo simbólico, todos los argentinos asociamos el ferrocarril al progreso. Sabemos que cuando el ferrocarril funciona, tiene mejores infraestructuras y forma parte de nuestra vida, ya sea en el ámbito de pasajeros pero esencialmente en todo el interior del país en el ámbito de carga, eso es un símbolo de una economía que va recuperándose”, concluyó el vicepresidente de Trenes Argentinos Cargas.
