“La madre de todas las batallas” es una frase hecha que nunca deja de funcionar para describir el peso propio de las elecciones en la provincia de Buenos Aires, tierra de más de 12 millones y medio de electores habilitados que representan más del 37% del padrón electoral. En sus 135 municipios, los precandidatos Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich se jugarán el 13 de agosto buena parte de sus chances de encabezar la boleta nacional de Juntos por el Cambio en octubre y, quizás, ocupar el sillón de Rivadavia a partir del 10 de diciembre.
Lo primero a tener en cuenta para analizar los armados de ambos precandidatos en tierras bonaerenses es que lo profundo de la interna que mantienen les imposibilitó sintetizar propuestas en los distritos. En una situación espejo a lo que Máximo Kirchner le imponía al albertismo en caso de que hubiera PASO en el peronismo, los candidatos del PRO definieron no compartir candidaturas locales y cada uno debió armar sus propias listas, con algunas pocas excepciones. Los principales perjudicados por el esquema “I” que se terminó imponiendo fueron justamente los jefes comunales cambiemitas, que pujaron hasta último momento por un sistema “V” en el que pudieran ir pegados a ambas candidaturas nacionales. Pero la bronca en los distritos por tener que dividir votos locales y aceptar el surgimiento de posibles internas a futuro no fue suficiente para saldar las diferencias entre el jefe de Gobierno porteño y la ex ministra de Seguridad, que hoy parecen irreconciliables.
Ese clima, sin embargo, no se replica por ahora en la disputa bonaerense. “Creemos que tenemos una muy buena lista nacional, que tracciona en todas las puntas, con Espert en el Senado, con Pichetto en Diputados, con Carrió en el Parlasur, tira el candidato a Presidente y toda la boleta”, expresaron a El Grito del Sur desde el entorno de Santilli, y agregaron que buscan una campaña “resaltando más nuestras fortalezas que haciendo hincapié en las debilidades de Patricia o Néstor (Grindetti), evitamos hacer campaña en esos términos”.
Desde la otra lista, el precandidato a vicegobernador de Grindetti e intendente de Trenque Lauquen, Miguel Fernández, afirmó a este medio: “hoy estamos muy contentos de tener un binomio integrado por intendentes, que además representan conurbano e interior, algo que no se daba hace mucho tiempo. Es algo muy potente tener dos intendentes en ejercicio, que conocen los problemas actuales. Nosotros no hablamos de los otros ni del pasado, pero no hubo ningún diálogo, ni pacto de no agresión o reuniones privadas para combinar una campaña, se da naturalmente así y esperemos que se mantenga, sin la necesidad de confrontar sino de explicarle a la gente qué es lo que proponemos”.
Poroteo
En ese contexto, se pueden desglosar grosso modo ciertos números que muestran cómo quedó la correlación de fuerzas interna entre los dos armados bonaerenses. De los 135 municipios de la provincia, 58 son gobernados por expresiones de JxC: la UCR manda en 30 distritos, el PRO en 20, 2 corresponden a referentes de la totalidad de la alianza y los 6 restantes a vecinalistas aliados. En ese mapa propio, la fórmula de Santilli y Posse, boleta bonaerense de Larreta, se quedó con el apoyo de 20 intendencias de JxC, un 34,48% de las que detenta la alianza opositora. Por su parte, Grindetti y Fernández, los alfiles provinciales de Bullrich, sumaron 35 distritos de los propios, el 60,34% del total.
Sin embargo, el criterio cuantitativo que favorece a Bullrich en cuanto a cantidad de municipios ilusiona a Larreta en relación a la cantidad de votos. Y es que el larretismo cerró el apoyo de varios de los intendentes de los distritos más populosos, acumulando 1.920.657 electores habilitados entre sus 20 municipios, lo cual representa el 42,67% de los electores totales de los 58 territorios cambiemitas y el 14,14% de todos los electores de la PBA. A su vez, Bullrich suma en sus 35 distritos unos 1.731.927 bonaerenses habilitados para votar, el 38,48% dentro de la alianza opositora y el 12,75% del total provincial. Entre los 58 municipios gobernados por JxC suman un total de 4.500.733 electores habilitados, el 33,13% del padrón bonaerense.
Solo tres distritos lograron romper la polarización entre Bullrich y Larreta. En Vicente López y en General Pueyrredón, los candidatos Soledad Martínez y Guillermo Montenegro, respectivamente, sí podrán ir colgados de ambas boletas. En General Madariaga, Esteban Santoro llevará boleta corta. Estos tres municipios suman 848.149 electores, el 6,24% del padrón. Entre los territorios más poblados de la provincia, La Plata (601.77 habitantes), Tres de Febrero (308.410), San Isidro (291.587), Tandil (112.902) y Olavarría (98.577) quedaron del lado de Larreta, Santilli y Posse, mientras que Lanús (404.264), Bahía Blanca (256.717), San Miguel (252.387), San Nicolás (126.538) y Lezama (98.577) se inclinaron por Bullrich, Grindetti y Fernández.
El precandidato a vicegobernador de la lista de Bullrich agregó a este medio que “vemos nuestra fortaleza en un conocimiento muy fino de los problemas de los intendentes, de los territorios, que es por donde pasa toda la política. Tenemos mucho para decir desde las necesidades que conocemos, sobre la autonomía municipal, la regionalización de la provincia, la gestión de los territorios, la diaria en los distritos”.
Por su parte, desde uno de los principales distritos alineados con el larretismo sostuvieron a El Grito del Sur que “Santilli es el más instalado por lejos. Ya le ganó al peronismo unido y está preparándose más que cualquiera, hace tiempo no para de recorrer la provincia. Es al único que le escuché propuestas concretas para el trabajo, la inseguridad y la educación”.
Interna radical
En el 2021 el radicalismo bonaerense atravesó una interna picante que enfrentó a un sector encabezado por Maximiliano Abad contra otro liderado por el intendente de San Isidro, Gustavo Posse. Mientras Abad contaba con mayor peso en el interior de la provincia y el respaldo de gobernadores como Gerardo Morales o Gustavo Valdés, Posse tuvo fortaleza en el primer cordón del conurbano y la banca de Evolución, de Martín Lousteau. Esa interna, que entonces se saldó en las urnas a favor de Abad, retorna en germen en este cierre de listas donde dos referentes importantes de esos espacios quedaron como candidatos a vice en ambas boletas.
Mientras Gustavo Posse acompaña a Diego Santilli fortaleciendo al larretismo en la primera sección electoral, Miguel Fernández, jefe comunal de Trenque Lauquen, representa a los intendentes del interior de la PBA en la lista de Néstor Grindetti. Fernández es, además, presidente del Foro de Intendentes Radicales de la provincia.
Así, 20 de las intendencias radicales apoyan la lista de Grindetti y Fernández mientras que 10 se inclinan por la de Santilli y Posse. La lista que impulsa Larreta cuenta también con el apoyo de Facundo Manes, que en 2021 cosechó 1.254.220 votos bonaerenses y, tras bajar su candidatura presidencial este año, coló en el tercer lugar de la lista de diputados nacionales del larretismo al abogado radical Pablo Juliano.
En cuanto al resto de los distritos de la alianza, nueve de los gobernados por el PRO apoyarán al larretismo mientras que otros nueve harán lo propio con Patricia Bullrich y dos irán con ambas boletas. Entre los vecinalistas, solamente Coronel Pringles quedó del lado de Santilli-Posse, mientras que Bragado, San Miguel, San Nicolás, Azul y Rivadavia se inclinaron por Grindetti-Fernández.
Secciones electorales
“Creemos que en la primera sección tenemos los mejores candidatos. Ahí es donde se va a definir la elección y hoy en nuestros números estamos ganando”, señalaron desde el equipo de Santilli a El Grito del Sur. En la primera, Posse y Diego Valenzuela, jefe comunal de Tres de Febrero, son los armadores de campaña de la lista larretista, que apuesta fuerte al conurbano para contrapesar con el interior en el que reconocen más potencia al armado de Bullrich. Quilmes, La Matanza y Lomas de Zamora son distritos de la tercera sección donde también esperan buenos resultados. “Horacio es muy competitivo en la tercera, lo tenemos ganando cómodo la PASO”, sostienen en el entorno del “Colo”. La octava sección es otra de las apuestas de las “palomas”, donde el intendente platense, Julio Garro, puede traccionar votos a las candidaturas de Larreta y Santilli.
La segunda, la cuarta y la séptima sección muestran bastante paridad entre los armados, aunque la territorialidad del radicalismo suma al ala bullrichista. A su vez, en la quinta y la sexta la lista de Grindetti y Fernández aparece con más peso propio. Particularmente en la sexta, inclinada por Bahía Blanca hacia Bullrich, el larretismo hará una “campaña segmentada con el Colo y Espert, que hizo una muy buena elección en el 2021, allí miden muy bien los dos”.
Por su parte, Miguel Fernández destacó en diálogo con este medio el rol que jugará el interior en la elección: “Hay 8 millones de habitantes que viven en el interior de la provincia, en 111 de los 135 municipios. Es la suma de Córdoba y Santa Fe. Nuestra propuesta es tener un vicegobernador que represente todo eso, la complejidad del interior con su estructura productiva y de servicios, que muchas veces queda desarticulado de los grandes centros de decisión”. El precandidato a vicegobernador le restó peso a los cruces picantes entre Bullrich y Larreta, y no se mostró preocupado porque derramen en tierras bonaerenses: “No hace falta meterse en esos niveles de tensión, y quizás arriba también se recalibre el mensaje en los próximos días, porque cuando hay mucho ruido a la gente le cuesta escuchar”.
“Halcones” y “Palomas” ya tienen sus nidos armados y huevos diseminados por todo el territorio bonaerense. La campaña apenas comienza.
