El violento suceso ocurrió el martes 7 de noviembre durante una capacitación virtual que dicta la ONG Orgulloses de Construir Comunidad en el marco del programa BA Multiplica, perteneciente al Gobierno de la Ciudad. Bajo el grito «Milei 2023, viva la libertad carajo», un grupo de personas -amparándose en el anonimato de las redes sociales- coordinaron un «sabotaje» al taller difundiendo el flyer y pasando nombres de estudiantes para poder loguearse. Inclusive uno de los usuarios llegó a prender su cámara, mostró su pene y comenzó a masturbarse mientras realizaba comentarios pedófilos en el chat, según denunciaron las y los organizadores.
Esta movida fue puesta en marcha a través de la web devox.me, un espacio de foros de debate juveniles donde se suele despotricar contra la perspectiva de género. En la convocatoria difundida a través de Devox, se invitaba a unirse al Google Meet (con el link correspondiente) donde «van a hablar de cuestiones de género y todas esas pelotudeces». «Fomenten el bardo» y «ayúdenme a DOMAR a femilocas y manginas», eran las otras consignas contra un taller que incluía temáticas como el uso de herramientas digitales, la sustentabilidad, el consumo responsable y la perspectiva de género.
Desde la organización Orgulloses denunciaron el hecho como un «ataque libertario» contra el taller con el fin de boicotearlo. «No es un hecho aislado propiciado por un grupo de enajenados, fue un acto de violencia contra las mujeres y un hecho de odio y discriminación coordinado que buscaba callarnos. Como sociedad debemos repudiar estos hechos y pensar en las consecuencias de los mensajes de odio», aseguraron. En ese marco, aludieron también a los discursos de los candidatos libertarios como Ramiro Marra y Lilia Lemoine, con manifestaciones respectivas contra la ESI y el derecho al aborto. Lo mismo con Javier Milei, quien en más de una oportunidad desconoció la brecha de género legitimando así el odio que sienten algunos sectores.
Frente a la situación en que el usuario mostró su pene y comenzó a masturbarse, les integrantes de Orgulloses entendieron que se trató de «un acto de violencia sexual hacia todas las personas en la sala y todo el colectivo de mujeres y LGBTIQ+». «Nos quiso violentar, disciplinar. Ese acto fue una amenaza implícita de violación», expresaron.
