La Argentina es un país duro en sus etiquetas. Denominarse de centro en lo que respecta al debate político lleva a una inevitable acusación de tibieza o de falsa tibieza. Salir en una foto con Horacio Rodríguez Larreta es prueba suficiente para etiquetar a alguien como macrista, al mismo tiempo que destacar una acción del Gobierno nacional califica a otra persona como peronista. Como si quienes estuvieran por fuera de esas categorías estuvieran, en realidad, escondidos en el closet.
Las nuevas generaciones, sin embargo, ya no toleran tanto el bipartidismo. Y si bien no es absoluto, ni están curados de espanto, en los últimos años han encontrado líderes con los que están -prácticamente- todos de acuerdo… uno de ellos es el argentino Mateo Nicolás Salvatto.
¿Quién es Mateo Salvatto?
Mateo, también conocido como Mateons, es un joven de 21 años, nacido en el barrio de Caballito; fue criado por una dulce profesora de lengua de señas, un serio contador y un hermano nerd. Ganó un mundial de robótica a los 16; entre los 17 y los 20 desarrolló la aplicación Háblalo! para personas con dificultades en la comunicación y fundó Asteroid Technologies, una empresa para asistir a personas con discapacidad; empezó como profesor en la secundaria ORT a sus 20 y se dedica a sus 21 a promover el amor a la patria y el antipersonalismo político.
Desayuna cada mañana té o café en una taza que dice “LA SALIDA NO ES EZEIZA” en celeste y blanco, y cuando no está trabajando, canta “Cinco Siglos Igual” de León Gieco con la misma alegría que baila a Juan Luis Guerra o que sigue a unísono canciones de trap.
Ex adicto a los juegos de computadora, hoy es emprendedor, lleva el título de CEO y también es orador. En cada una de sus charlas revive a Mafalda y su “¡Sonamos muchachos! Resulta que si uno no se apura a cambiar el mundo, después es el mundo el que lo cambia a uno”.
Entonces habla de ser miembro de la juventud y cambiar el mundo en pantuflas o guardapolvo, con la tecnología como bandera, ya sea desde la habitación o la escuela. Haciendo hincapié en que, siempre y cuando se tenga acceso a Internet, el rol del Estado debe ser promover e innovar en la educación, porque para él, como para muchos otros, si se invierte en tecnología, se gana en todo lo demás.
Pero, ¿cómo ha conseguido Mateo aplausos de distintos sectores políticos y sociales?
Hay dos (posibles) respuestas correctas: la primera es porque la aplicación que ha diseñado no tiene tintes políticos, ésta toca una discapacidad que afecta a cientos de millones de personas en el mundo, de las cuales, ya 100 mil han relatado buenas experiencias con Háblalo! en 60 países. La segunda, quizá la principal, es porque si bien siempre ha sido muy crítico y no apoya el modelo del ex-gobierno Kirchner ni el actual, también ha ido a programas donde la palabra “Cristina” se repite múltiples veces por minuto, como “Ya Somos Grandes” de Diego Leuco con la propuesta de terminar lo que Mateo llama una “guerrilla interna”.
“El problema es la guerra interna constante que tenemos los argentinos, no nos ponemos de acuerdo con nada […], en Argentina polarizamos la ley, la justicia, la democracia, la educación, todo… Con tal de responder a corrientes políticas personalistas”, y agregó también: “Se defienden personas, no ideas y principios, y defender personas es cortoplacista, […] . Hay que apoyar y defender ideas a largo plazo, para que el país se construya a futuro… Porque las personas pasan, pero los países quedan”.
Dejemos de matarnos entre nosotros por defender los intereses de personas que no son la solución, sino el problema. Defendamos ideales y principios, no individuos. Largo plazo, no corto plazo. Futuro, no pasado.
Las personas pasan, los países quedan. Argentina se puede, vamos 🇦🇷 pic.twitter.com/YBS0TdDe7m
— Mateo Salvatto 🇦🇷 (@Mateons) October 24, 2020
«¿Más Mateos y menos Ofelias?»
Tras haber sido entrevistado por el periodista Luis Novaresio, Eduardo Feinmann, conocido por sus cruces con la joven legisladora de la Ciudad de Buenos Aires por el Frente de Todos, Ofelia Fernández, hizo público vía Twitter el siguiente dicho: “Más Mateos, menos Ofelias”.
El comentario se hizo rápidamente viral y las palabras “Ofelias” y “Mateos” fueron tendencia en la misma red social. Allí, distintos usuarios compararon los logros académico/profesionales de ambos, y otros usuarios, como la reconocida escritora Luciana Peker, remarcaron que dicha comparación “apela a que el futuro sea sólo de varones”.
Mateo y Ofelia, que poco comparten ideológicamente, dieron como respuesta una lección de respeto y tolerancia al contestar a Feinmann:
“No es ‘más Mateos, menos Ofelias’. Es menos de ese personalismo que llevó a Argentina a la decadencia actual, y más jóvenes sentados en la misma mesa, independientemente de su ideología, para ponernos de acuerdo en cómo reconstruir JUNTOS la Argentina destrozada que nos dejan”.
https://twitter.com/Mateons/status/1323294690553303041?s=20
Publicó Mateo y, entonces, contestó Ofelia:
“Por suerte hay lugar para ambos. Las nuevas generaciones venimos un poco más maduras y no necesitamos hacer purga si tenemos recorridos distintos o diferencias, quién te dice incluso encontramos algunos puentes. Abrazo
@edufeiok ya lo vas a ir aprendiendo”.
Por suerte hay lugar para ambos. Las nuevas generaciones venimos un poco más maduras y no necesitamos hacer purga si tenemos recorridos distintos o diferencias, quién te dice incluso encontramos algunos puentes. Abrazo @edufeiok ya lo vas a ir aprendiendo https://t.co/aphuoEbgCh
— Ofelia Fernández (@OfeFernandez_) November 2, 2020
Porque de eso se trata la democracia: de estar sentados en la misma, independientemente de las ideologías, para encontrar (o construir) algunos puentes.
¿Es Mateo un político?
Cuando recientemente le consultaron si le interesa adentrarse a trabajar en el sector público, Mateo contestó: “Para meterse activamente en política hay que saber mucho, y yo aún no me siento preparado” y que ha elegido, por el momento, seguir en el sector privado.
En lo que respecta a esta generación y la que se viene
Cuando Julio Leiva entrevistó al productor musical Bizarrap para el programa Caja Negra, planteó lo siguiente: “Antes decían: ‘Steve Jobs hizo Apple en un garaje, Jeff Bezos, Bill Gates…’, y yo creo que esta generación, en parte, está saliendo de las habitaciones”.
Tal como Bzrp representa a la música de éxito mundial desde la pieza, Ofelia a las mujeres jóvenes con participación política desde la escuela y Jero Batista a universitarios interesados en la ciencia para cambiar las cosas, Mateo es la representación de la juventud emprendedora argentina que no carece de empatía.
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