Ayer, en el primer día hábil de las nuevas medidas de aislamiento, Horacio Rodríguez Larreta envió un proyecto a la Legislatura porteña que busca instrumentar “un marco jurídico” que le permita a la Ciudad de Buenos Aires iniciar negociaciones para adquirir vacunas por sus propios medios. La propuesta llegó luego del visto bueno del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y de que la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires consiguiera un aval para negociar con laboratorios privados y gobiernos extranjeros la llegada de nuevas dosis. A su vez, el proyecto de ley se presenta una semana después de que se conociera el éxito en la gestión del gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, que aseguró haber conseguido un millón de dosis de la vacuna china Sinopharm.
Esta semana inicarán los debates formales sobre la materia en el legislativo porteño. «Facúltese al poder Ejecutivo a la adquisición de vacunas» es el título de la convocatoria a reunión conjunta de las comisiones de Presupuesto, Salud, Hacienda, Administración Financiera y Política Tributaria. El encuentro tiene fecha para este viernes 28 y será la instancia inicial en la que los diputados y diputadas de la Ciudad evaluarán la propuesta de Larreta.
La iniciativa del Jefe de Gobierno no está exenta de polémicas: el proyecto de ley -que incluye la firma de los ministros de Salud, Fernán Quiros, de Hacienda, Martín Mura, y del Jefe de Gabinete, Felipe Miguel- propone la posibilidad de “iniciar negociaciones y celebrar los contratos necesarios” incluso en moneda extranjera. Asimismo, establece cláusulas de confidencialidad -que quedarían exceptuadas del deber de divulgación- y condiciones de indemnidad patrimonial respecto de indemnizaciones. Finalmente, reconoce la jurisdicción de tribunales con sede en el extranjero en caso de litigio.
A inicios de mayo, Horacio Rodríguez Larreta ya había recibido en su despacho de Uspallata a Marykay Carlson, encargada de Negocios de los Estados Unidos. Allí, el Jefe de Gobierno solicitó apoyo en el abastecimiento de vacunas y tendió los primeros puentes para una eventual llegada de dosis de AstraZeneca. «Necesitamos que Estados Unidos apoye a la Argentina con más vacunas, porque eso nos permitirá acelerar el ritmo de vacunación en la Ciudad”, explicó Larreta en aquella oportunidad al concluir la reunión con la diplomática estadounidense.
Esa misma semana se conoció el inicio de las gestiones de Larreta con Israel para conseguir la llegada de la vacuna Pfizer. El articulador del encuentro habría sido Gabriel Martino, exdirector de HSBC, y su contraparte, la embajadora israelí en Argentina, Galit Ronen, quien dialoga de cerca con Felipe Miguel y Fernando Straface, secretario de Relaciones Institucionales del GCBA. Incluso se especulaba con un posible viaje de Rodríguez Larreta a Oriente Medio, pero estos planes quedaron frustrados luego de la salvaje ofensiva israelí sobre Gaza y tras el anuncio de nuevas medidas de confinamiento en nuestro país.
Israel y Estados Unidos son dos de los países que mayor porcentaje de su población han vacunado. Estados Unidos privilegió la vacunación interna y ahora discute una estrategia geopolítica de penetración a través de las millones de dosis que acumula. Israel fue el laboratorio de pruebas de Pfizer: actualmente cuenta con el 56,59% de su población completamente vacunada y es el tercero en este rubro a nivel mundial, solo por detrás de Seychelles y San Marino. Ninguno de los dos países ha abastecido a la Argentina, pero ambos han dado muestras de tener un marcado interés en dotar a nuestro país con sus vacunas. Otro capítulo más de la geopolítica de las vacunas, esta vez con sede en la Ciudad de la Furia.
